[color=indigo]Bueno, siguiendo con las historias y arpovechando un momento libre en la uni, he escrito lo siguiente, que aunque no es lo que yo pensaba mandar, por falta de tiempo (el periódico tiene que salir), pues me conformo con esto... espero que vosotros también...
<center>Mente muerta, mano viva
derraman los pensamientos
como antes goteaban de ellos leucocitos y glóbulos.
Aquí estoy escribiéndote, ojo avizor a tu cuerpo
mientras tu desnudez gotea también
elegancia sobre las sábanas.
Que el Sol no interrumpa tu descanso.
Que sea el anciano Don Tiempo quien me juzgue.
¿Recuerdas esta mañana?
La conversación que hemos mantenido,
goteando (también) el café en nuestras tazas.
Siempre te sienta bien su olor por las mañanas,
se pega a tu piel con espíritu de buenos días.
Reprochas mi ausencia de palabras....
¿no ves que si no hablo es para no incomodar tu palidez silenciosa?
Eres tan frágil que no sé si mi halo te descongelará,
si te escurrirás entre mis dedos.
El cabello te corta la cara mientras te alargo la taza:
por favor, no te derritas.
Y no me miras, sólo el filo de tu pelo me señala indignado.
Hace tiempo, en realidad que te has ido.
Hoy una maleta es testigo mudo
de lo efímero de tus pies sobre la alfombra.
Y tratas de explicarme, sé que hablas pero no te entiendo,
mientras, me hago muy pequeño al ritmo del tic-tac de las prisas.
Tic-tac desaparezco, tic-tac quieres desaparecer.
La maleta te espera en la salida, con el ticket de ida comprado.
La puerta, con la foto del taj mahal, se burla.
Taj Mahal para una princesa.
Taj Mahal para mi niña.
Ahora, tras un encuentro entre mis celos y tu vientre,
descansas desnuda sobre la cama, engalanando las sábanas
de leucocitos y glóbulos.
Que nadie te despierte mientras te derrites.
Que nadie te interrumpa mientras te deshielas....
... entre mis manos. </center>

vaya sí que es duro publicar algo subjetivo... mejor sigo con mis noticias... [/color]