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La historia comienza con un vídeo pregenerado por ordenador. Un cliente extraño nos contrata para robar una valiosísima gema de una exposición con varias "chucherías" japonesas).
Mientras estamos accediendo a la exposición, aparece una tal "Breeze" (o ese es su alias al menos). Podemos decir que es justo lo contrario de Anya. Mientras nuestra protagonista se dedica a robar con tranquilidad y sin herir a nadie, "Breeze" no se preocupa en lo más mínimo de lo que se cruza delante de su camino. Es decir, aniquila sin piedad al que se entrometa, y además manda helicópteros armados en las huidas de Anya. No vamos a revelar más de la trama, seguro que a cada uno le interesa descubrirlo por su cuenta.
Ahora que hemos realizado una exposición bastante clara de lo que se nos va a mostrar en el juego, lo mejor es que empecemos a desmigajar todo apartado por apartado.
GRÁFICOS
El engine gráfico de Stolen es bastante acertado. Tras dos años de intenso desarrollo se nota en todo momento el interés por cuidar todo el entorno visual para dotarlo de una buena dosis de realismo. El juego funciona en visión tercera persona (exceptuando cuando apuntamos con el arma- al igual que en Metal Gear Solid-y con algún otro objeto) y con cámara móvil. La libertad de la cámara es una herramienta esencial para poder desenvolvernos correctamente en la aventura, sobre todo en las fases por los exteriores, que deberemos hacer muchos movimientos. Los escenarios son completamente tridimensionales, con modelos notables y en general correctos. Por supuesto englobamos los escenarios interiores (habitaciones) y exteriores (la ciudad en sí). Como en todo momento jugamos de noche, Blue 52 ha hecho especial hincapié en el uso de las sombras, que nos servirán como herramienta para escondernos (aunque eso sí, a veces da la sensación de que todo está demasiado luminoso).
El diseño de los personajes está bastante logrado, especialmente el de Anya Romanov, que cuenta con un cuidado especial. Los guardias y otros personajes suplementarios no destacan tanto, pero no "cantan" negativamente. En cuanto a las animaciones, la verdad es que volvemos a revivir el mismo fenómeno que en el diseño de los personajes. Anya se mueve con extremada fluidez, con multitud de movimientos realmente logrados. Los demás personajes lo hacen de manera algo más ortopédica.
Los vídeos pregenerados por ordenador (CG o FMW) están un paso por detrás. No son malos- ni mucho menos-, pero las texturas son un poco pobres y los movimientos de Anya son sorprendentemente más estáticos y toscos que los del propio motor del juego.
En líneas generales los gráficos de Stolen cumplen perfectamente. Ahora bien, seamos francos; pese a que la calidad es bueno, el título de Hip Interactive no llega al nivel de sus grandes rivales…
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