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Todojuegos estuvo en las oficinas de Take2 para probar la versión final, doblada y traducida al castellano, de uno de los juegos mas esperados de este verano, Bioshock.
Jose Muñoz (Senior Brand Manager de 2K) tuvo la gentileza de enseñarnos en persona todos los aspectos que este Shooter trae consigo. Y no son pocas las cosas que podríamos decir de este terrorífico juego, de hecho en Todojuegos ya os habíamos adelantado muchos de sus detalles cuando el juego aun se encontraba en su 60% de desarrollo. Sin embargo esta segunda vez pudimos jugar las 2 primeras horas del juego y deleitarnos con un inicio que arranca cargado de acción e intriga. Resumiremos los aspectos más llamativos y sorprendentes, al mismo tiempo, que nos hayan sobrecogido en la última versión remasterizada que Take2 tiene en sus oficinas.
Inicio; Nueva Partida…
Para empezar hablaremos de la llamada “primera impresión visual”. En resumidas cuentas, la grafica del juego. Todo comienza recitando una frase que ya intenta sumergirnos, y nunca mejor dicho, en aquel ambiente que caracteriza a todo el juego. Un ambiente oscuro, triste y caótico. Atmósferas extrañas pero con un toque de nostalgia que nos puede recordar a títulos que hayáis podido jugar anteriormente. Tales como “Last Exile”, “La ciudad de los niños perdidos” o la saga de “Siberia”. Mundos de climas especiales y raramente emotivos que transportan todos nuestros sentidos a la burbuja de la situación.
Tras de esto, ahora si, podemos ver el apartado grafico. Tras un accidente de avión que acontece con la pantalla en negro, lo único que podemos ver son las llamas ondear sobre el agua y la luz de la luna tras ellas. El apartado visual es muy atractivo y quizás lo más llamativo es el buen tratamiento que han llevado los desarrolladores para conseguir tan alta fidelidad del agua. Reflejos, vibraciones y física muy bien realizada y que nos da la sensación de estar duramente trabajada. Claro que por otra parte el agua es un elemento que estará muy presente a lo largo del juego y no es de extrañar la arraigada dedicación y duro esfuerzo que han destinado a este elemento. Un acierto desde luego que nuestros ojos agradecerán ya que, en cuanto avancemos en la historia un poco, podremos admirar, en sus múltiples apariciones, muchos de sus efectos.
Nadaremos unos pocos metros para llegar a un obelisco hierático y desafiante en la soledad del mar. Encontraremos un pequeño acceso y subiremos unos pocos peldaños para salir del agua. Entonces, ante nosotros aparecerá un portón de hierro y una inscripción que nos avisa de la magnitud de aquel descubrimiento. “Aquí no hay lugar para los dioses solo para el hombre” Ahora con mas intriga y desconfianza abrimos la puerta de la torre y nos involucramos en una de las mejores historias contadas para el mundo de los shooters en primera persona. Tendremos que cruzar unas salas donde su silencio nos da la bienvenida a un nuevo mundo.
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