El horror renace entre cadáveres que no descansan.
El survival horror tiene un nuevo miembro. Cronos: The New Dawn está ya entre nosotros y en TodoJuegos hemos podido analizar en profundidad la versión de PC del juego gracias a Bloober Team. En este tiempo le hemos dedicado un mimo especial para poder probarlo en las distintas apuestas que Steam nos brinda, es decir, hemos jugado tanto en PC, como en Steam Deck y en Nvidia Geforce Now, y os traemos nuestras impresiones.
El viajero, el agente del Colectivo
Así comienza nuestra historia, somos El Viajero, pertenecemos a una organización secreta cuyo objetivo es recolectar las esencias de quienes murieron en “El Cambio”. Un suceso que transformó a los humanos en unos monstruos de distinta forma llamados los Huérfanos. Nada más comenzar saldremos de nuestra cápsula y veremos una ciudad absolutamente en ruinas. Estaremos en la Polonia de los años 80, pero aquí está el punto: hemos viajado en el tiempo.
Nuestra misión es encontrar a otro viajero con ID ND-3500 y continuar su misión; por eso nos despiertan tras la hibernación. Los primeros pasos definen el juego, con más lentos pero firmes y con una pistola muy difícil de controlar, iremos entendiendo las mecánicas del juego a la vez que nos cagamos literalmente de miedo mientras avanzamos entre las ruinas. Con las primeras notas de la gente, empezamos a escuchar las primeras premisas importantes del juego y es que a los Huérfanos no se les debe dejar mezclarse porque absorberán el cadáver y se harán más fuertes de lo que ya son de base. Creedme que son hueso duro de roer.
Nuestro primer enfrentamiento nos pone en situación y, tras él, nuestro enemigo queda hecho una especie de bola de carne, inerte, pero de la que solo nos podemos deshacer quemándola.
Such is our calling
Esta frase es el lema del Colectivo, la organización secreta a la que pertenecemos, y nuestra protagonista la dirá como el lema que le da ánimo tras una cruenta batalla. En Cronos: The New Dawn cada tiro tiene que estar muy medido, las balas se acaban muy pronto y tendremos que ir con pies de plomo investigando muchas zonas secretas para intentar conseguir materiales y así poder fabricar distintos objetos como balas, curas y demás para poder enfrentarnos a lo que nos acecha. Durante los primeros compases del juego siempre estarás, como mucho, con 6 balas y un enemigo cae con dos buenos tiros a la cabeza o con un cargador entero en el resto del cuerpo, y apuntar es complicado.
Por tanto, tenemos dos componentes clave en Cronos. Por un lado, la exploración, que lleva tiempo y dedicación, y por otro, la acción de enfrentarnos a nuestros enemigos, que son muy duros y complicados, pero pueden serlo más… Cuando avancemos, comenzaremos a tener un problema que será cada vez más común y es que el segundo lema es “Don’t let them merge”, es decir, no dejes que se fusionen. Si dos enemigos te atacan y te cargas a uno, el otro es posible que quiera ir a por el cadáver para fusionarse. Si les dejas, tendrás un bicho el doble de fuerte y de 3 golpes estás fuera. Por tanto, tienes que matarlos, evitar que se fusionen y “Burn them, or they return”, quemarlos o volverán.
