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Existen tres modos principales de juego destinados al juego monojugador. El primero de ellos es el Modo Historia en el que debemos de superar de forma continuada una serie de niveles. Estos niveles se presentan en un mapa por el que nos moveremos de una a otra prueba, pudiendo elegir entre dos rutas posibles en algunos casos. Hay cuatro tipos de dificultad caracterizados por un mayor número de niveles que jugar y por la facilidad –o no- de superar las fases. El modo experto estará bloqueado en un principio y recupera el modo de juego de Meteos original en el que las fichas sólo se pueden mover verticalmente. El mayor problema es que te obligan a jugar del tirón todos los niveles, no existe la posibilidad de guardar el progreso para continuar la partida en otro momento, aunque si fallamos en una prueba, podremos continuar la partida todas las veces que deseamos, sin la necesidad de empezar desde el principio. Este hecho se agradece cuando nos atascamos en una fase.
La siguiente modalidad de juego es el Modo Desafío, también para un solo jugador. En él podremos elegir cualquiera de las historias que ya hayamos desbloqueado jugando en el Modo Historia. Podremos elegir en cada pantalla tres tipos de juego: Modo fácil que consiste en jugar hasta que las fichas sobresalgan por la parte superior de la pantalla, Contrarreloj que nos retará a conseguir lanzar un número determinado de bloques (300, 500 ó 1000) en el menor tiempo posible y Ataque Puntos en el que competiremos por conseguir el mayor número de puntos en un tiempo determinado (3, 5 ó 10 minutos).
El último modo, Contra la CPU, repite en cierto modo el esquema de juego del Modo Desafío, pero con la novedad de que estarás jugando a la vez contra la CPU la cual podrá enviarte lluvias de piezas que descarte o recibir las que tú lances al espacio. En este caso existen dos tipos de juego. En el modo tiempo competiremos durante un tiempo determinado y ganará aquel que haya conseguido más puntos, sin importar las veces que ha perdido la partida. En la modalidad Desafío tendremos un número de vidas y ganará el que sobreviva al resto de competidores, sin importar el número de puntos obtenidos.
Todos los modos serán completamente configurables, desde el número de vidas que tendremos, el tiempo que deseamos jugar, el número de competidores y la dificultad de los mismos. Otro parámetro que podremos elegir es el tipo de habilidad especial de la que queremos aprovecharnos en el área de juego. Existen dos posibles: nitro (que lanzará sin gravedad las fichas) y lento (donde las piezas caerán lentamente para que podamos hacer combos de lanzamiento). Toda esta combinación, unida a la notable dificultad del título, hacen de METEOS Magia Disney un juego con una duración más que notable.
No puedo pasar sin hacer notar que se ha eliminado uno de los modos de juego que fueron aplaudidos por los amantes del Meteos original. Estoy hablando del modo Fusion en el que podías crear tus propios planetas otorgándoles características propias, siendo un editor de niveles muy completo. Es cierto que era mucho más fácil situar en la historia la creación de un planeta que una historia Disney, pero eso no es ni mucho menos, excusa para que se haya eliminado ese fantástico modo de juego.
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