Salvo un nivel, en todos los escenarios tarde o temprano tendrás que acabar con varios enemigos. Empezaremos el juego sin tener siquiera una estaca, pero según avanzamos niveles, además de nuevas armas, recibiremos nuevos objetos como el crucifijo o las granadas de ajo. Esto no hará más que ampliar nuestras posibilidades de superar el nivel. Aun así, controlar el uso de la munición es fundamental.
La jugabilidad en general esta bien: un FPS clásico para echar el rato aniquilando vampiros, durante el juego encontraremos notas que nos desvelarán lo ocurrido. Durante los combates, debemos tener cuidado de no acumular muchos enemigos persiguiéndonos, ya que incluso el hecho de tener que recargar, o no poder retroceder, significará reiniciar bien desde el principio o bien desde el punto de control. Everdark no es una experiencia demasiado larga, ya que dura aproximadamente cuatro horas.
La oscura advertencia de Everdark
En cuanto a su faceta gráfica, Everdark es un juego creado por un equipo indie con aportaciones de los alumnos de la escuela de arte ESDIP. Esto, junto al deseo de los desarrolladores hace que la estética de Everdark sea típica de un juego retro. Tan retro que parece sacado de un punto intermedio entre PS2 y PS3. No es necesariamente malo ya que hablamos de un indie, pero no recordaremos este juego por su apartado artístico. Por otro lado, a la hora de ver los modelos de armas, cadáveres, enemigos e incluso personajes y animaciones, no son demasiado realistas, en algunos casos son copias con animaciones y aspectos genéricos. En general, los enemigos nos atacan a base de garras o bien con ataques a distancia.
En cuanto al apartado sonoro, encontramos música ambiente mezclada con rock y metal. Según comentaron los devs, ellos mismos han compuesto parte de esa banda gracias a que tienen sus propios grupos o bandas. Música adecuada para un juego destinado a llenar nuestra IU de disparos y monstruos sedientos de sangre. Un buen trabajo artesanal.
Veredicto
Everdark: Undead Apocalypse es un FPS fugaz que rinde tributo a los orígenes dorados de los FPS. Un juego divertido para pasar el rato, ya que dura menos de cinco horas y en palabras de los desarrolladores “queremos que los jugadores sufran”. Gestionar la munición o escoger cuando pelear y cuando correr nos permitirán superar los quince niveles de este primer capítulo.
Los desarrolladores tienen planeados otros dos capítulos para el juego siguiendo la misma trama, con nuevos enemigos y demás. Pero no podemos analizar lo que no está en el juego. Por otra parte, el apartado artístico es de temática retro, con menciones a películas y otros juegos, aunque un tanto deficiente. Por el contrario, el apartado sonoro combina con la atmósfera y la jugabilidad.