Cada unidad puede realizar una acción principal, una secundaria y una de movimiento. Podemos optar por usar dos acciones secundarias. Incluso, a medida que recogemos diversos orbes presentes en el campo de batalla, podremos usar lo que en juegos como DOTA 2, Smite o League of Legends se denomina “ulti”: habilidades de gran poder. Cada campeón tiene uno o varios estilos de juego. Esto se debe a que podemos escoger entre más de un “estilo” de personaje. Dichos estilos cambian las habilidades de los personajes. Igualmente, según avanzamos, nuestros campeones recibirán reliquias, unos objetos que ofrecen diversas pasivas al personaje.
Hay multitud de habilidades distintas, cada una con su rango. De hecho, a la hora de visualizar el rango, se pueden apreciar algunas similitudes con el ajedrez, un juego donde la estrategia es fundamental. Al margen de la dificultad, Skygard ofrece batallas rápidas donde se premia el uso inteligente de las habilidades, la sinergia entre personajes y el uso estratégico del mapa.
A la hora de superar una misión, contamos con la posibilidad de pasarnos por nuestro campamento, reclutar nuevos campeones e interactuar con los miembros de nuestro creciente grupo. Durante las batallas, nuestros campeones y los del enemigo pueden ser eliminados. No obstante, sobre todo una vez que jugamos con pilares, por ejemplo, estos volverán al siguiente turno. Skygard Arena ofrece una jugabilidad en general buena, entretenida, mezclando elementos narrativos y mecánicas de juegos populares de forma muy positiva.
El mundo de los continentes flotantes
A la hora de hablar del aspecto gráfico, vemos que Skygard Arena ofrece un estilo similar al de otros juegos MOBA que ya hemos mencionado, “entre otros”. Un aspecto a medio camino entre cartoon y caricatura, en el que vemos a los campeones con sus habilidades y su “ulti”. Un apartado colorido, con ilustraciones dignas de Lorcana, preciosas, aunque también nos muestran ciertas debilidades. Una de ellas es la escasez de escenarios variados: hay muy pocos “biomas”. Todo lo contrario ocurre en cuanto a campeones y animaciones de combate. En cuanto al apartado sonoro, encontramos un total de treinta y nueve pistas compuestas por el artista Raphaël Joffres, un conjunto que alterna momentos épicos con otros más calmados, según nos encontremos en combate o en el campamento. No llega a ser sobresaliente, pero sí supone un buen complemento para el resto de elementos.
Veredicto
Skygard Arena es una buena mezcla resultante de juegos como X-COM con diversos MOBA como League of Legends. Un juego desafiante, aunque amigable, para diversos tipos de jugadores. Además, su componente competitivo supone un excelente estímulo para poner a prueba nuestras habilidades frente a otros jugadores. El juego cuenta con un apartado gráfico aceptable y una banda sonora correcta, que logrará igualmente atraer a muchos jugadores. Es posible que el juego no haya explotado todo su potencial tras salir del Early Access, pero eso no impide que sea un buen juego.