Personalmente, encuentro muy
disfrutables el modo Guerra Terrestre, una especie de copia de
Battlefield en el que 64 jugadores con presencia de vehículos, y el
pausado Visión Nocturna. El primero de ambos aporta un punto de variedad
interesante en el frenetismo y la masacre indiscriminada que suponen
las rachas de bajas, y el segundo es una vuelta de tuerca sobre el
típico modo hardcore sin indicadores visuales que nos obligará a
tomarnos las cosas con más calma, con la sensación constante de que la
diferencia entre la victoria y la derrota se encuentra en una sola bala
bien disparada.
El único detalle que no me termina de cuadrar en
el modo multijugador son los mapas, ya que tras la locura que supuso
Black Ops 4 con sus tamaños y entornos, no puedo evitar pensar que estos
nuevos mapas son algo liosos y difíciles de manejar. Colores muy
similares, falta de detalles, caminos no muy lógicos, o mapas en los que
supone todo un desafío salir y no morir inmediatamente son cosas que no
recuerdo en pasadas iteraciones, pero que son muy comunes en esta nueva
versión. Al menos, la teoría dice que los próximos mapas del juego
serán gratuitos para todo el mundo, dejando el contenido del pase de
temporada para otro tipo de menesteres, por lo que el futuro de este
juego no está escrito en piedra, ahora más que nunca.
Exprimiendo nuestras PS4
Os
confesaré algo. Una de mis funcionalidades preferidas de esta actual
generación es la capacidad de realizar capturas de pantalla y grabar
vídeos con los que después rememorar nuestros mejores momentos, o para
compartir con nuestros amigos. Por supuesto, no tardó en llegar uno de
estos momentos jugando online a Modern Warfare, mantuve el botón Share
apretado para guardar el vídeo actual y... nada. No reacciona. Al cabo
de un minuto, por fin reacciona la interfaz. Otros tantos segundos más
tarde, al fin, pude guardar el vídeo y continuar con mi partida...
mientras me masacraban miserablemente, alejado de la acción por mi
triste ilusión de querer guardar una baja doble.
A partir de ese
momento, comencé a fijarme que mi PS4 Pro lo estaba pasando realmente
mal para ejecutar el juego. De primeras, el juego luce una factura
técnica impresionante, con unos efectos de iluminación y reflejos
fantásticos, unos modelos hiperrealistas que quitan el hipo, y unos
entornos amplios y detallados moviéndose en unos más que fluidos 60
frames por segundo. Es especialmente increíble el detalle de los
personajes, siendo algunos de ellos actores famosos y claramente
reconocibles. Pero incluso en el caso de los más desconocidos, la
calidad alcanzada en estas escenas de video es fantástica. Parecen
auténticos seres humanos, actores en una producción de alto presupuesto
que se están generando en tiempo real en la potencia de nuestra consola.
Pero
está claro que el juego requiere de tantísima potencia de nuestra
consola que toda la interfaz habitual parece ralentizarse ante tal
magnitud. Como ya os contaba en mi anécdota, si sois de los que guardáis
los vídeos a posteriori, más os vale hacerlo entre partidas. Si queréis
salir un momento a la Store a ver qué se cuece, lo mismo tardáis menos
cerrando el juego y volviendo a iniciarlo después que dejándolo en
segundo plano. Es una situación extraña, pero que reconozco me llama
mucho la atención. Parece que la próxima generación está a la vuelta de
la esquina, lo queramos o no...
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