Un sistema de juego casi intacto, e igual de lento
Dejando
ya el tema de la historia de lado, el juego es un RPG por turnos al uso
cuyo sistema jugable no ha sido modificado de forma notable con
respecto a las partes anteriores. El tÃtulo en sà se puede explicar como
una amalgama de diferentes opciones de diferentes sagas. Por ejemplo,
cada capÃtulo mantiene su estructura en dos partes, una primera en la
que jugaremos ese dÃa a dÃa en la academia, donde reforzaremos vÃnculos
con nuestros estudiantes al más puro estilo Persona, daremos clases y
realizaremos tareas de baja importancia, mientras que la segunda parte
de cada acto supone una misión importante, sobre todo en clave polÃtica.
Estas misiones serán las que hagan realmente avanzar la trama y es
donde encontraremos los mejores momentos de esta tremenda trama, de
nuevo, al igual que Persona y sus dÃas lÃmite para acabar con el
capÃtulo en cuestión.
Una vez estemos en combate, el juego es una
mezcla entre Final Fantasy o Dragon Quest, por sus turnos, sus claras
especializaciones dependiendo del personaje y su uso del cuarzo,
minerales que nos aportarán magias como si de materia se tratasen, y la
movilidad de juegos como Disgaea o Tales Of, puesto que cada arte,
habilidad o hechizo cuenta con un área de efecto, lo que provocará que
nuestra colocación y la de nuestros enemigos sea un componente táctico a
tener muy en cuenta. También nuestro link con los estudiantes y
compañeros de equipo nos permitirá, si somos lo suficientemente hábiles
moviendo a nuestros aliados, realizar ataques extra o especiales sobre
los enemigos. Todo esto puede parecer algo complejo para un recién
llegado a la saga, pero os aseguro que antes o después, lo acabaréis
pillando.
Mi único problema con todo este mecanismo de juego es
su extrema lentitud. Ya me sucedió al jugar los dos primeros Trails,
tÃtulos en los que agradecà sobremanera la existencia de un botón de
turbo que acelerara toda la acción. Seguro que este hecho habla peor de
mà de lo que deberÃa, pero os reconozco que una vez os sentéis a jugar
al tÃtulo, os daréis cuenta de que su sistema de juego, pese a ser
intenso y variado, provoca que hasta el más nimio combate se convierta
en toda una odisea. Y puedo aguantar pasarme 5, o 10 minutos combatiendo
contra un jefe final... pero que esta sea la tónica habitual es algo
que no llevo muy bien. Menos mal que con el turbo se hace más llevadero,
pero ojalá el próximo tÃtulo haga las peleas más llevaderas.
Unos gráficos de la pasada generación
Pasemos
a hablar de otro de los puntos no tan fuertes del tÃtulo, siendo este
su apartado técnico. Sólo tenéis que echar un vistazo a capturas de
pantalla del tÃtulo o ver algún video para que intuyáis a que me puedo
referir. Y es que Trails of Cold Steel III, pese a ser un juego ya
ideado para PS4, sigue reutilizando el motor gráfico de la pasada
generación. Es decir, Trails of Cold Steel III sigue manteniendo ese
nivel gráfico excelente que pudimos disfrutar en nuestras PlayStation
Vita en sus dos pasadas entregas, o en juegos como Tokyo Xanadu eX. O,
dicho de otra manera, el haber dejado atrás las versión de PS3 o de Vita
no se ha traducido en una mejora técnica, más allá de una tasa de
frames más estable.
No quisiera pasarme de criticón en este
sentido, ya que está claro que no se puede tener siempre todo, y un
juego que ha invertido tanto tiempo en su guión, personajes y
traducción, si ya contase con un aspecto como el del próximo Tales Of,
ya serÃa increÃble. Pero al menos, si que os quisiera dejar claro que si
os vais a comprometer a jugar a este gran tÃtulo, no lo hagáis por sus
gráficos. Y tampoco os acerquéis a él si no tenéis ni idea de inglés,
por supuesto, ya que si no os enteráis de lo que ocurre, no tendréis ni
un sólo motivo para disfrutar del juego.
|
|
|