A lo largo de nuestra aventura y exploración del mundo será casi
fundamental la recolección de materiales, comestibles y distintos
objetos que nos sean de ayuda. Dichos objetos u materiales podremos
combinarlos entre sí para potenciarlos o para conseguir efectos
distintos a los que normalmente tendría. Algunos son más que
imprescindibles para mejorar nuestras armas y armaduras, ya que sin
ellos no podremos mejorarlas y nuestro camino, si ya de por sí es
difícil, lo sería aún más.

Pero no será tan sencillo como ir a
recoger setas al bosque una mañana de domingo. Gransys es una región
peligrosa, muy peligrosa. Detrás de cada piedra, de cada árbol acechan
los peligros. Trasgos, lobos, bandidos y demás calaña estar al acecho
dispuestos a acabar con nuestros pasos sobre la tierra. Y no serán los
únicos, la variedad de enemigos es lo suficientemente grande para que no
nos dé la sensación de estar luchando siempre con el mismo grupo de
enemigos. Pero sin duda alguna los que se llevan la palma, serán los
“mini-bosses” que nos saldrán al paso y que supondrán un reto y un
peligro mucho mayor que los enemigos comunes. Quimeras, cíclopes, grifos
y demás fauna harán acto de presencia con el fin de truncar nuestro
cometido.
El Arisen perfecto, con el equipo perfecto
La
riqueza de Gransys, sus posibilidades, no se reducen a una gran variedad
de enemigos u objetos. La personalización de nuestro héroe es bastante
amplia. Pero más allá de los atributos físicos, lo realmente
interesantes son las habilidades, o mejor dicho las vocaciones.
Podremos
escoger entre nueve vocaciones distintas, cada una con sus habilidades
propias. Podremos ser desde un poderoso guerrero que con cada mandoble
de espada tiemble la tierra, un arquero rápido y preciso o el más
poderoso de los hechiceros de todo Gransys. Estos tres ejemplos son sólo
una pequeña muestra de las vocaciones que tendremos disponibles.
Podremos cambiar en cualquier momento, tanto nuestra vocación como la de
nuestro peón principal, para adquirir habilidades de otras clases.
A
nuestro Arisen se unirán otros guerreros para ayudarnos y hacer que el
camino hacia nuestro destino final sea lo más ameno posible (aunque no
será así). Nuestra primera piedra la pondremos creando a nuestro peón
principal a nuestro gusto o que complemente las habilidades de nuestro
Arisen. Hecho esto, podremos contratar otros peones a cambio de puntos
de falla, aunque esto sólo si son superiores a nuestro nivel. Del mismo
modo nuestro peón puede ser contratado por otras personas del mundo,
trayendo consigo conocimientos y puntos de falla. Nuestro equipo podrá
ser de hasta tres peones, más nuestro Arisen claro. Debemos tener mucho
cuidado a la hora de elegir la clase de peones que queremos que nos
acompañen, ya que será fundamental para avanzar con fluidez.

Luces y sombras en Gransys
Gransys,
como ya hemos hablado, es un mundo con un terreno muy a tener en cuenta
y con numerosos sitios en los que perdernos investigando. Gráficamente
el juego se mueve fluido pero cuenta con varias trabas en este aspecto
que le impiden despuntar en materia gráfica. Popping excesivo, clipping
por doquier, tearing, animaciones un tanto robóticas, algunas sombras
más que raras. Por contra, para equilibrar la balanza tenemos unos
efectos de explosiones y fuego bastante buenos, una línea de dibujo que
nos permite ver ciudades y construcciones desde bien lejos, ciclos
día/noche realmente preciosos y, a pesar de algunas cosas raras, una
iluminación bastante buena.
|
|
|