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Un juego ambientado en nuestros días, en lo que parece ser toda una Nueva York lúgubre y decadente llamada “Grant City”, repleta de rincones oscuros y personajes siniestros. El juego maneja perfectamente los tiempos mezclando luz y oscuridad magistralmente, flojea en unas cinemáticas poco creíbles y quizás en su reiteración en los mil y un combates a los que tendremos que enfrentarnos dejando como única variación los estilos de lucha que emplearemos.
Que queremos decir con esto, pues que el juego es un constante avanzar y avanzar, moviéndonos velozmente por los escenarios iremos partiéndole la cara a unos y a otros de las diferentes maneras que disponemos. Una serie de golpes y combos de los que nuestro protagonista está dotado harán de las peleas callejeras lo más atractivo sin duda del juego, clicando una serie de botones diferentes (bien explicado el apartado de combos en el menú del juego) abatiremos con nuestras propias manos a los miembros de las triadas sin apenas dejarles defenderse, podremos incluso desarmarlos y utilizar las armas contra nuestros ellos terminado la lucha en un abrir y cerrar de ojos.
Una opción en este aspecto muy interesante son los “ajusticiamientos”, serie de combos finales tales como roturas de cuellos, concatenación de golpes y patadas en cuerpo y rostro, etcétera, que solo clicando el botón “A” realizaremos automáticamente, siendo estos golpes finales representados mediante cortas cinemáticas y que harán si cabe la pelea más corta. Si los golpes fueran poco también dispondremos de diferentes y distintas armas, pistolas, metralletas, rifles, granadas, hasta incluso un lanza cohetes, que usaremos sin piedad contra nuestros enemigos. La conjunción entre armas y puñetazos es importantísima ya que la escasez de munición no dejara a lugar ir todo el tiempo pegando tiros y la aparición de enemigos muy poderosos fuertemente armados tampoco dejara a lugar ir dando puñetazos y patadas a diestro y siniestro, combinar ambos aspectos será la clave de nuestro éxito.
Y qué decir de nuestro fiel amigo Shadow, la utilización del perro es un grandísimo acierto, unas veces y en su gran mayoría iremos en la piel de Jack, pero en otras y puntuales ocasiones podremos disfrutar de nuestro “pequeño” amigo. Con sus capacidades especificas, Shadow puede moverse de manera más sigilosa terminando con nuestros enemigos casi sin que ellos se enteren, pudiendo localizarlos con su sexto sentido, estos se verán reflejados en pantalla de tres diferentes colores, azul, amarillo y rojo, dependiendo claro esta del nivel de alerta que el “perrillo” suscite en los mismos. Podrá abalanzarse a yugulares, así como a diferentes partes del tronco de nuestros enemigos, llegando incluso a zonas más sensibles y bajas que resultaran dolorosas de ver para nosotros los varones.
Todo lo anteriormente mencionado sumado a nuestro acierto con el disparo (tiros en la cabeza sobre todo), la utilización de combos, los ajusticiamientos y demás harán subir exponencialmente una barrita blanca sita en la zona inferior izquierda de nuestra pantalla, para completar un “Tiempo bala” a lo Max Payne que como ya conoceréis ralentiza el segundero haciendo los movimientos de nuestros enemigos mas lentos dándonos algo más de margen a nuestro ataque. Este “Tiempo” no solo será esencial cuando estemos totalmente rodeados por nuestros enemigos, sino para a su vez eliminar a más de un “Jefe Final” sin problemas, bueno al menos no muchos.
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