En realidad bajo la religión de Silent Hill que existe desde antes del siglo XIX, hay un Dios cuya forma y nombres han ido variando a lo largo del tiempo. No es lo mismo hablar del Dios de los Nativos, que hablar del Dios de La Orden en la decada de los '70 como lo es en nuestro siglo actual. Para el año 2000, Dios ya tiene una figura como demasiada iconografía Cristiana, se habla de Santa Alessa, San Nicolás como doctor, Santa Jennifer, etc. Aunque sus rituales han variado poco, el Dios siempre se refiere o está relacionado al Sol, la purificación está generalmente relacionada con el fuego y Dios a veces es representado como una figura femenina. Para los Nativos, Dios era el Sol y representaba a todos los elementos de la Naturaleza. Incluso el mito religioso fue variando.
Lo de los múltiples Dioses no es un concepto demasiado difícil de entender, se dice que cada uno en su interior tiene a su Dios y su Demonio, correspondiendo con las emociones y recuerdos vividos la balanza de energía positiva o negativa tendrá mayor o menor influencia. Como consecuencia de la acumulación de emociones negativas, nacerá en cuestión el Demonio. En el caso de Alessa, ella tiene su propia imagen de Dios/Demonio y Dahlia tiene una imagen diferente, la forma que tenga este Dios/Demonio dependerá del mayor grado de influencia.
La historia de los pecadores a la que te referís sólo abarca a Silent Hill 2. Cada Silent Hill tiene una historia muy diferente. En Silent Hill 4 las víctimas corresponden a un determinado personaje que posee en su interior ese elemento clave para completar el ritual. De modo tal que el mismo Walter Sullivan pasa a ser víctima del ritual. Por ejemplo, para completar el conjuro que invoca al Caos, se necesitó de un personaje con temperamento fuerte como el caso de Richard Braintree que simbolizará Caos. En el caso de un personaje sensual por el que Walter sentía atracción tenemos a Cynthia Velasquez, que simboliza Tentación. Nuestro personaje es el Dador de Sabiduría, por lo tanto él será el último, Eileen Galvin es la Madre Renacida. O sea que cada víctima cobra un rol importante dentro del ritual, no por ser pecadores sino por su mismo estado de existencia. La primera víctima fue Jimmy Stone, el Demonio Rojo, el mentor de Walter Sullivan que lo inició en el ritual y en la religión.
Salu2!