Nunca subo a una balanza porque no sé que me va a pesar.
Los avaros se mueren sin dar el último suspiro.
No es que los argentinos bailen tango. Es que no saben dónde llevarse a la pareja.
La unanimidad es la opinión del que manda.
Para los verdugos, el trabajo es la muerte.
El piropo es un equilibrio entre la oferta y la demanda.
No hay guerra civil. Todas las guerras son inciviles.
El suicida se mata porque no confía en su médico.
Lo peor del farsante es que es auténtico.
El Decreto es un capricho oficial.
Los presos políticos son el símbolo de la libertad.
¿Cómo harán para vivir los muertos de hambre?
Los carteros sufren de carteroesclerosis.
El verdadero drama del teatro es la falta de público.
El embarazo es la concepción que confirma la regla.
Los prólogos en general no explican nada.
Sólo dan explicaciones los que no tienen razón.
¿De qué se reirán los esqueletos?
La advertencia consiste en amenazar por las buenas.
En Sodoma y Gomorra se inventaron las relaciones públicas.
La bofetada es un aplauso unilateral.