Bueno aquí traigo otro “juegoâ€

Un día más en mi apartamento, un día más solo, triste y sin ningún aporte en mi vida, se que dije que no lo haría, pero no lo puedo evitar, tengo que volver ha hacerlo…, mi vida no tiene sentido sin ello, lo siento mama, pero tu hijo no puede obedecerte infinitamente y hoy por fin me he dado cuenta, voy a vestirme y voy a buscar aquello que necesito y no se encontrar.

Necesito salir a la calle. Abro la puerta, todos pasan a mi lado y no se dan ni cuenta de q les falta...lo mismo q a mi. Estan dormidos. No se donde buscar, pero en el fondo se q lo voy a encontrar...y no tardare demasiado. Esta vez no parare hasta encontrarlo. LLego a la puerta, no tiene nada inscrito q haga suponer donde me encuentro. Llamo, tardan en responder.

Después de un buen rato golpeando esa puerta sin cesar, por fin se abre, no hay nadie al otro lado, o al menos eso parece, solo veo un pasillo, largo, lleno de misterio, decido continuar hacia delante, conforme voy avanzando por el unos escalofríos recorren muy cuerpo, llevo mas de dos horas caminando y no consigo hallar nada, me doy la vuelto, decido irme, y entonces…

..oigo algo, un ruido, quiza sea una persona que intenta ocultarse, quiza una rata.Sea lo que sea, me doy la vuelta y oteo en la oscuridad.No encuantro nada a primera vista asi que decido dejar de respirar por un momento para ver si consigo escuchar algo. Silencio.Lo unico que se puede escuchar es el sonido del trafico a lo lejos, decido irme.

Repentinamente, una voz desgarradora resuena en el interior. La casa se torna oscura, negra como la noche. El miedo se apodera de mi, algo no encaja. ¿Qué secretos esconde la negrura? Decido caminar hacia las entrañas del edificio, aunque mi cuerpo sigue temblando violentamente.Oteo el umbral, miro ciegamente. Escucho el silencio y...

Suena el despertador, no otra vez esa horrorosa pesadilla, Ana me dijo que debería ir a visitar a un psicólogo que esas cosas pueden desembocar en algunos problemas más graves, pero claro, no le puedo hacer caso a Ana, solo sabe correr en su horrorosa rueda, además que puede saber una rata de mi vida¿?, nada, ¡no!, siempre igual como no me de prisa llegare otro día más tarde a la funeraria…

salgo de mi casa pensando aun en mi reciente sueño, trato de distraerme mirando a la gente, pienso que ellos tambien deben tener sus problemas, pero no logro sacarme la pesadez de mi mente, faltan solo tres cuadras, pero se me hacen tan largas, siento la nesecidad de escapar de mi rutina, de un cambio de vida, pero... yo? no, ya estoy grande para cambios, no creo poder hacerlo...

Caminaba lentamente, poniendo ímpetu en evitar pisar las baldosas negras, que una a una iba contando con números impares. Una... tres... cinco....
Al doblar la esquina, una chica tropezó conmigo con torpeza. Era muy guapa. Su bolso al suelo. Me agaché para cogerlo y me tomó como a un ladrón. Sus gritos hacia mí y el dedo señalándome bastaron para saltar la alarma de mi cabeza. Tenía dos opciones. Salir a correr, o insistir a la chica para que dejara de gritar. Yo no era un delincuente.... ¿o sí? si escapaba, la policía tendría otra razón para buscarme, y si me quedaba, no me quedaría más remedio que explicarle la verdad sobre mí, a aquella señorita. No había tiempo, tenía que reaccionar rápido.

Correr. Era lo q me repetia la voz en mi mente, correr sin parar. El miedo de la noche volvio a mi como si estuviera en trance. Estupidamente empece a correr, di la vuelta a la esquina. Sin mirar ni donde iba. Notaba algo en la mano, por qué no solte el bolso? Ahora mas razones para esconderme. El callejon se torno silencioso, solo oia mis pasos y mi respiracion cada vez mas entrecortada...me hacia viejo...

al fondo del callejon habia una puerta, vieja, descolorida, tenia el aspécto de no abrirse desde hacia ya muchos años, ante mi desesperacion, no tube otro remedio que intentar entrar por esa puerta, me acereque, vacile por un momento, y me decidi a abrirla, aunque no fue tan sensillo, estaba trabada, empuje mi cuerpo con toda la fuerza que me quedaba, y se abrio, parecia vacia, estaba oscura, senti los gritos de la mujer cada vez mas cerca, cerre la puerta y quede inmobil con el bolso en la mano...

estaba completamente desorientado, no sabia que pensar, si era el destino, si aun no habia despertado de mi sueño, cantidades de pensamientos pasaban por mi mente en ese momento, pero decidi no llevarles el apunte y seguir caminando por ese pasillo oscuro y escalofriante, a medida que me adentraba en el, iva reconociendo el lugar hasta que llegue a una habitacion y me detube inmediatamente aterrorizado por el desgarrador gito que oi a solo unos pasos de mi

Me di la vuelta, y no podía creer lo que estaba viendo, la pequeña chica de belleza efímera que me había estado persiguiendo estaba colgada de sus axilas por una especie de hierros azules, la chica entre llantos me dijo que ya estaba donde ellos querían y con una fuerza sobre humana rompió los hierros que la sujetaban y se fue acercando poco a poco a mi mientras no paraba de derramar sangre….

Su rostro q habia visto tan bello estaba desencajado con una expresión q era aterradora. Sentia sudor frio correr por mi espalda, la vision terrorifica de aquella mujer -supongo q lo era- derramando sangre a borbotones y sin importarle aparentemente. Me hablo, pero su voz sono metalica, diferente...me sentía paralizado y pegado al suelo por algo invisible, y miraba horrorizado pero sin poder apartar la mirada... "Has tardado en venir"....