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Regresa el cuarteto que limpiará la ciudad de espectros.
Aquellos que crecimos en los ochenta recordamos con gran cariño y nostalgia una de las películas más representativas de la época: Los Cazafantasmas. El film salido de las mentes de Dan Aykroyd y Harold Ramis nos relataba las desventuras de un grupo de científicos decididos a crear una nueva industria: la captura de entes sobrenaturales que tanto suelen molestar a los mortales. El resultado fue una película de humor con increíbles efectos especiales para la época y que supo calar hondo en todo aquel que tuvo la oportunidad de visionarla. Cinco años después apareció una secuela que, si bien perdía algo de frescura respecto a la original, continuaba ofreciendo unas dosis de humor y entretenimiento más que suficientes.
Han pasado veinticinco años desde el estreno de la primera película. Muchos eran los rumores de que Dan Aykroyd estaba escribiendo el guión de la tercera entrega. La sorpresa vino con el anuncio de que Terminal Reality estaba trabajando en un videojuego basado en la famosa franquicia. Aún más sorprendente fue comprobar que la gran mayoría de los protagonistas del film estaban implicados en la producción del título, por lo que en un principio las esperanzas de ver algo decente estaban más que justificadas. Una vez aparecidas en el mercado las versiones para las consolas de Sony (PS2 y PS3), podemos comprobar si por fin nos encontramos ante una buena adaptación de película a videojuego.
Historia
La historia nos sitúa en 1991, dos años después de los hechos acaecidos en la segunda película. El negocio de los Cazafantasmas va viento en popa, con un acuerdo firmado con el alcalde de Nueva York que les asegura una gran cantidad de trabajo y un buen seguro frente a los desperfectos que como ya bien sabemos suelen provocar durante sus particulares capturas. Es tal la cantidad de clientes que nuestros amigos deciden contratar a un nuevo miembro para el equipo. Nosotros representaremos el papel de este nuevo fichaje, del cual no conoceremos el nombre ya que el resto se referirá a nosotros como “el nuevo” o “cadete”. Tampoco le escucharemos abrir la boca durante toda la aventura. Nos encontramos ante el típico ejemplo de protagonista mudo, que en este caso encaja de una manera estupenda ya que los fans difícilmente habrían aceptado la creación de un nuevo personaje que a duras penas habría podido competir con el carisma que desprenden el resto de protagonistas. Y es que durante el juego podremos comprobar como la caracterización de cada uno de los Cazafantasmas se ha cuidado con todo detalle. Disfrutaremos de los complicados discursos cargados de términos científicos del doctor Egon Spengler, los divertidos chascarrillos de Ray, los torpes intentos del doctor Venkman por ligar con toda señorita que se cruce en su camino y los incrédulos comentarios de Winston. Cada uno de ellos ha sido doblado por el actor que originariamente le dio vida en la pantalla de manera magistral.
Nuestro primer trabajo consistirá en la captura de nuestro viejo amigo Moquete (Slimmer en el original), que una vez más ha escapado y se encuentra haciendo de las suyas por las instalaciones del hotel en el que originariamente fue encontrado. Esta primera misión dará origen a una trama sencilla pero más que suficiente para un título de estas características. De nuevo la deidad sumeria conocida como Gozer volverá a hacer de las suyas, en un nuevo intento por crear una puerta que conecte varios mundos y hacerse con el control de nuestra dimensión. La historia nos llevará a visitar lugares ya vistos en la gran pantalla, recreados con todo lujo de detalles. El hotel, la biblioteca, las calles de Manhattan… todo ha sido trasladado al juego con gran cuidado. También nos encontraremos con viejos fantasmas conocidos como la bibliotecaria o el gigante Mr Stay Puft.
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