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Toda acción conlleva una reacción durante el transcurso de este juego la cual la lleva ya desde el comienzo de él, en donde seremos sometidos a un test, tendremos el libre camino de escoger quien somos y como nos comportaremos.
De vez en cuando llega hasta nuestro territorio juegos, con un público minoritario, pero que avezadas distribuidoras se atreven a probar suerte con ellos. Es el caso que nos ocupa, SteamBot Chronicles, quizás no será recordado como uno de los más grandes del catálogo ni tan siquiera de su género, pero si que a estas alturas de la próspera vida de PS2 supone un soplo de aire fresco.
Una propuesta de juego original, de la mano de IREM, donde podremos ir trazando el destino de nuestro personaje a través de las decisiones que tomemos. Dicho esto y sin más dilaciones comencemos...
Get Ready!!! for Steambot Chronicles
Nuestra aventura arranca en una playa donde nuestro protagonista, Vanilla, despierta, gracias a la ayuda de una chica llamada Connie, tras un naufragio. Sin recordar nada de lo que le ha ocurrido anteriormente nos encontraremos en un mundo a caballo entre la primera revolución industrial y la fantasÃa, en donde vehÃculos y edificios de principios del siglo XX comparten protagonismo con los "Trotmobiles", hÃbridos entre coches de los años sesenta y robots bÃpedos. Un mundo amenazado por los "Killer Elephants", un grupo organizado de delincuencia con no muy buenas intenciones.
La labor que nos irá sucediendo en el juego la iremos decidiendo nosotros mismos a través de las respuestas que demos a los personajes secundarios de esta aventura. De hecho y según nuestro comportamiento irá variando la opinión o la forma de calificarnos que tendrán los NPC. También podremos optar por unirnos al grupo de música de Connie, los "Garland Globetrotters" ya que de hecho en el juego tocaremos desde una harmónica hasta una guitarra, y según nuestra pericia convertirnos en lÃder de la banda o incluso asociarnos a los bandidos para realizar fechorÃas. La historia del juego en si, no es ni excesivamente compleja, ni original. Contamos con la sempiterna lucha del bien y el mal, solo que ahora decidiremos en que bando estamos. Como he comentado, la originalidad estriba en la decisión y los efectos que acarrean nuestra manera de ser.
Un mundo en Cell-Shading
De hecho no se podÃa haber escogido una técnica mejor, dada la estética manga del juego, el cell-shading le va que ni pintado. Personajes y "trotmobiles" lucen en todo su esplendor. No asà los escenarios, los cuales a menudo se abusa de la niebla y de diseños de edificios simples o grandes espacios vacÃos. Aunque aún y sus limitaciones nos encontramos sorpresas como por ejemplo el efecto del agua, el paso del dÃa y la noche o la luz que entra a través de una ventana.
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