Después de pasarse un tiempo como Early Access de PC, el estudio alemán Chasing Carrots lanza la versión 1.0 de su título Halls of Torment, además ha aprovechado la ocasión para lanzarlo también en las consolas PlayStation 5 y Xbox Series. Es un juego de supervivencia de hordas con tintes roguelite y pequeños toques de ARPG que nos mantendrá enganchados durante mucho tiempo.
Una pequeña vuelta de tuerca
Ambientado en un mundo medieval de fantasía, Halls of Torment puede parecer el típico juego de hordas pero tiene algún pequeño detalle que lo lleva un poco más allá. Pero recapitulemos, estos juegos de supervivencia/hordas se basan todos en una premisa muy simple: derrotar hordas interminables de enemigos mientras nuestro personaje sube de nivel. Es un concepto muy sencillo pero que bien llevado hace que el jugador esté enganchado durante horas y horas.
¿Qué tiene de diferente Halls of Toment entonces?, en lo que es su base jugable respecto a otros títulos nada, pero añade alguna capa que hace que se diferencie del resto. Al subir de nivel, como es costumbre, elegiremos entre varias opciones para mejorar nuestro personaje, como por ejemplo, velocidad de ataque, salud, daño, etc. Amén de diferentes “magias” pasivas, que se irán lanzando automáticamente, como rayos, cuchillas y un amplio abanico de las mismas.
Lo que hace que se diferencie del resto de juegos es que, además de mejorar diferentes atributos fuera de cada partida, también podremos equiparnos diferentes objetos que nos otorgarán distintos atributos, para que nuestras incursiones en los salones del tormento sean un poco más sencillas. Eso sí, tendremos que desbloquearlos previamente. Por supuesto no contaremos con un único personaje, empezaremos con el clásico guerrero y su fiel espada como único personaje jugable, pero muy pronto desbloquearemos muchos otros como una arquera o un mago, que harán que cada partida sea diferente a la anterior.
Jugablemente no difiere mucho de otros juegos de supervivencia de hordas. Aquí también podremos escoger entre auto ataque y auto apuntando (esto último no lo recomiendo). Aunque, como hemos mencionado anteriormente, donde más destaca es en las posibilidades de construcción de nuestro personaje mediante mejoras de diferentes estadísticas, habilidades pasivas o el equipamiento de diferentes objetos.
Sabor añejo
Halls of torment tienen un regustillo antiguo que mola mucho. Son gráficos prerrendizados, alejándose de la tendencia actual hacia el pixel art de los indies actuales. Éstos gráficos recuerdan a nuestra niñez cuando jugábamos diferentes ARPG que había en el mercado. Remarcar que en ocasiones la fuente utilizada para los textos se me ha hecho difícil de leer dado lo pequeña de la misma.
El juego no cuenta con apenas voces, más allá de las que tienen los personajes que nos vamos encontrando a lo largo de los niveles. La música que nos acompaña durante nuestras partidas no llega a hacerse pesada aunque cada nivel cuente con un tema únicamente.
Conclusión
Cuando estaba en early access se ganó una buena legión de seguidores, ahora, con la versión 1.0 se reconfirma que Halls of Torment es muy buen roguelite. Su inconfundible estética, unido a las posibilidades que se nos ofrecen durante cada partida consigue tenernos enganchados durante varias horas. Si te gustan este tipo de juegos no deberías dejar pasarlo y darle una oportunidad.