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Una nueva versión, algo más completa.
No os voy a ocultar que me encantan los juegos del P-Studio, parte de Atlus y principales responsables de la magnÃfica saga Shin Megami Tensei: Persona, por eso disfruté muchÃsimo allá por 2011 su juego Catherine, un tÃtulo de puzzles que se salÃa de lo que nos tenÃan acostumbrados. En esta ocasión, ya no es el P-Studio, sino el Studio Zero, creado por Katsura Hashino entre otros grandes nombres del P-Studio, pero el juego sigue siendo el mismo: Catherine: Full Body, una nueva versión para una nueva generación.
El matrimonio, ese extraño objetivo
Catherine: Full Body es un juego que, como su versión original, se basa en una temática que no atrapará a todo el mundo por igual, por lo "simple" de su premisa y la madurez que implica. El juego nos presenta a Vincent, un joven de 32 años que lleva saliendo años con su novia Katherine. Ahora mismo se encuentra en un punto algo particular... hace poco que ha cambiado de trabajo, y aunque él se ve como siempre, todo empieza a cambiar a su alrededor. Kat empieza a hablarle de cómo todas sus amigas se están casando, de la posibilidad de tener un hijo, mientras que su grupo de amigos tiene de todo un poco, desde un solterón empedernido al hombre más responsable que puedas echarte a la cara.
Todo esto le provoca un cierto estrés, ya que Vincent lo único que quiere es lo que queremos muchos... que todo siga como siempre. Lamentablemente, una noche se encontrará con una explosiva rubia, Catherine, con la que al parecer será infiel a su pareja. Esto provocará que empiece a tener unas extrañas pesadillas por las noches, en las que se convierte en un carnero condenado a escalar una torre infinita, con la certeza de que como caiga al abismo... no volverá a despertar jamás.
Un relato de cuernos y carneros actualizado
Si ya conocisteis el juego en su dÃa, hablemos de las novedades. En esta ocasión, los problemas de Vincent no se reducirán a dos chicas, sino que tenemos a una tercera persona echando leña al fuego, Qatherine, o Rin, como la conoce todo el grupo. Esta supuesta chica no tardará en aparecer en escena, huyendo en la calle de un misterioso acosador. Vincent, como héroe accidental que es, la salvará y comenzará a cuidar de ella tras conocer que sufre amnesia y que no recuerda nada de sà misma... salvo una obsesión con una determinada canción de piano.
Lo interesante de Rin es que su inclusión a la historia no queda demasiado pegote, ya que es algo relativamente independiente a la dinámica de las otras dos heroÃnas. Rin no aporta la seriedad de Kat ni la lujuria de Cat, sino que sus intervenciones son más bien únicas, más alegres, un punto de inocencia que a las edades de Vincent parece perderse irremediablemente. Además, conforme avancemos, conoceremos que Rin no es en realidad una mujer, sino que es un chico, un travesti, o una "trap", si conocemos el término inglés, lo que aporta un punto de vista radicalmente diferente en la trama, y nuestra propia visión de lo que se nos presenta.
Lo que es el juego en sà también ha recibido nuevas escenas animadas e imágenes, como interacciones con Cat, nuevos finales (aparte de los obvios de Rin), nuevas fotografÃas para el móvil, o escenas relatando la vida en pareja de Vincent y Kat, lo que ayudará mucho a reducir la mala imagen a la que nos predisponen en el juego original. También tendremos un nuevo estilo de juego, el "remix", en el que dejaremos de manejar bloques individuales para tener piezas de diferentes tamaños tipo Tetris, y un modo multijugador online en el que competiremos en esta continua escalada de carneros.
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