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¿Chicas monas en paños menores jugando a Ping Pong? Eso es lo que nos trae Proein directamente desde Japón a un precio muy asequible. ¿Nos despechugamos?.
Basta con mirar el mercado de videojuegos para comprobar como los juegos deportivos juegan un papel muy importante dentro de este amplio mundillo. Se puede decir que los juegos deportivos gustan a un buen puñado de videojugadores que cada año demolen las estanterías de las tiendas especializadas buscando sus hornadas anuales de "Fifa Football" o "Pro Evolution Soccer". Definitivamente el fútbol es lo que más vende en nuestro país, el deporte rey lo llaman, pero hay muchísimos deportes que aun gozan de gran apoyo entre las masas. Lo mismo se refleja en los videojuegos, encontramos juegos deportivos de todo tipo; desde Formula 1, baloncesto, golf, tenis, fútbol americano, y un largo etcétera. Desgraciadamente, hay deportes que siguen siendo completamente ignorados, uno de ellos el Ping Pong. Este deporte- que recuerda vagamente (más bien mucho) al tenis (pero en miniatura)- ha tenido a lo largo de estas tres décadas de existencia de videojuegos muy pocos representantes. Aun así, algunas desarrolladoras se han atrevido a romper la regla y nos han creado un simulador de este interesante deporte. De la mano de SOS GameStreet, desarrolladora procedente del país del sol naciente nos llega un peculiar producto. Se trata de Pink Pong, un título que Proein ha decidido distribuir en España a un precio muy dulce (14, 95 E) y asequible para todas las personas.
...¡Love saga!...
Pink Pong es un juego que pertenece a una saga de videojuegos nipones que se bautizó como "love". En esta saga podemos ver a chicas monas que no tendrán ningún tipo de tapujo en quitarse sus ropas para quedar en ropa interior a ojos del videojugador. A pesar de que en nuestro país sólo ha llegado este capítulo, en Japón ya hay otros como el "Pinball Fun", todos coloreados de igual manera que este Pink Pong y acompañados con personajes como Riho Futaba, una bella muchacha de imponentes senos vestida de colegiala. Desde luego es un juego que desprende aire japonés por todos los costados, basta con ver el diseño general para que cualquiera pueda descubrir el país de origen de este juego sin pensar mucho (salta a la vista ya que todos los personajes son japoneses y están vestidos con trajes que los relacionarás con este país oriental sin necesidad de mucho esfuerzo).
El juego está protagonizado básicamente por chicas, es más, solamente hay un hombre en todo el juego y ese es Ryota Hino, un tipo afable que se gana la simpatía de casi toda la gente y goza de un talento especial para esto de los deportes.
¿…Hay erotismo?
Como hemos comentado antes, Pink Pong es un videojuego que está orientado claramente hacia los chicos de la casa, y no nos referimos a los niños, sino al público masculino. El tinte del juego recuerda claramente al anime o al manga, y no es para menos, todo responde fielmente a este arte japonés (que allí efectivamente se considera arte y cultura). Al principio cualquiera que veo los menús, todos cargados de horribles pinceladas rosas al estilo Barbie (corazones por aquí y por allá, todo decorado de manera hortera), pensará que es un título pensado para niñas o jóvenes fans de las historias dulces o telenovelas de tarde, pero no. Las apariencias engañan y el juego es algo diferente a esa premisa inicial que uno pueda hacer. Dejando en principio lo que es el simulador en sí, nos vamos a centrar en su apariencia. Y es que ver jugar a ping pong a chicas en bikini resulta cuanto menos sorprendente. Si me dicen que juegan a Volleyball (como las bellas damiselas virtuales de Doax) en bikini no me sorprendería en absoluto…pero a ping pong. No hay ni que decir que los bikinis les sientan de maravilla, y es que como cabe esperar el elenco de personajes está compuesto por chicas guapas, con medidas magníficas, las curvas justas (siempre siguiendo estrictamente el ideal de belleza actual) y unos senos despampanantes que los desarrolladores han querido resaltar (incluso en su movimiento de vaivén). Por supuesto no hay ninguna jugadora con kilos de más ni nada por el estilo.
Si ya, chicas guapas y todo eso... ¿pero el simulador? ¿Existe?
Aunque os sorprenda, en este juego realmente se puede jugar a ping pong. No todo es observar bikinis y chicas preciosas, sino que también tendrás que tomar el pad entre tus manos y probar el ping pong de verdad…bueno, no tan de verdad. Está visto que el título de SOS no intenta en ningún momento buscar el realismo supremo, es más, podríamos decir que es un juego bastante arcade. Pink Pong tiene similitudes con juegos como Mario Tenis ( no, no, ya sabemos que Mario, Wario no posan en ropa interior ni nada por el estilo-gracias al cielo-) en cosas como los golpes especiales que en Mario Tenis veíamos como lanzamientos acompañados por una especie de aurora boreal alrededor de la pelota y en este Pink Pong lo vemos de manera parecida (aunque todo hay que decirlo, de manera notablemente más cutre).
Escrita la descripción general de lo que nos va a deparar este título japonés lo mejor será que nos dejemos de rodeos y comencemos a despechugar (nunca mejor dicho) este juego en sus diversos apartados. ¿Estará a la altura? Sigue leyendo
GRÁFICOS
Gráficamente el juego no es muy consistente. Destacan sobre todo el diseño tridimensional de las chicas (Ryota, el único chico carece de el diseño sólido de las féminas), que sin ser apabullante, merece al menos un pequeño elogio. Todas las chicas visten de manera diferente, con ropas de lo más estrambóticas. Vemos desde uniformes de colegio, de enfermera, profesora, y hasta de Papá Noel. Eso si, todos tienen un factor común, y es que tienen un escote de aquí a Cuenca. En cuanto a las animaciones, nos atrevemos a decir que estamos ante uno de los títulos más cutres a nivel de animaciones. Excluyendo el movimiento de los pechos de las chicas (eso bastante logrado) lo demás es bastante malo. Sólo hay que observar vagamente lo ridículo que resulta ver las contrincantes corriendo de lado a lado (porque sólo corren de un lado a otro lado, sin moverse un ápice) de manera tan ortopédica que reirás casi sin quererlo. Además de que la sencillez de estas animaciones nos encontramos con que hay muy pocas (cuando pierden siempre hacen lo mismo, levantan la mano en señal de derrota y ahí se acabó toda la chispa). Los efectos de luz son poco más que aceptables- y no hay muchos- y se ven en los golpes especiales de los personajes.
Los escenarios desentonan un poco con los modelados de las chicas. Son bastante variados, pero el diseño de estos escenarios es tan sencillo y retrógrado que hecha un poco para atrás. Son como "papeles", falta mucho trabajo, pero como es un juego que busca más la diversión que la sensación de realidad-además del precio accesible- se puede perdonar estas carencias gráficas (no estamos ante un "must have" como Final Fantasy X, Halo 2 o Metroid Prime 2).
Finalmente cabe destacar que el juego tiene selector 50/60 hz. Tenemos que aplaudir a SOS, D3, y Proein por traer el juego con selector en territorio Pal…y eso que es una versión económica. Buen trabajo
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