Dynasty Warriors: Origins

PC, PlayStation5, Xbox Series
8.0
Dynasty Warriors: Origins 10 TodoJuegos
Publicado el 01-04-2025 a las 23:01
Autor: Daniel "Sakuya" Hernández

Una nueva perspectiva para contarnos El Romance de Los Tres Reinos.

No es la primera vez que un estudio coge un relato y lo hace videojuego, hay algunas obras que sinceramente se prestan muy bien a ello. Algunos optan por obras actuales de éxito, aunque luego hacen títulos que no están a la altura de la obra original y por otro lado tenemos aquellos estudios que deciden tirar por la literatura clásica para plasmarla en la pantalla.

El Romance de los Tres Reinos fue publicado en el Siglo XIV y sigue siendo una fuente inagotable para Tecmo Koei que ya lleva una enorme cantidad de títulos de la franquicia Dynasty Warriors desarrollados que se basan precisamente en dicho relato. Para daros una clase muy rápida sobre el periodo de esta obra, El Romance de los Tres Reinos narra los hechos desde el final de la Dinastía Han en el año 169 D.C hasta la reunificación de toda China en el año 280 D.C. y como cabría esperar es un relato de guerra, ambiciones... lo normal en un periodo turbulento de rebeliones y combates.

Tecmo Koei ha querido ver como ofrecer una historia que llevan ya años contando en las diferentes entregas de la franquicia y bajo mi punto de vista lo ha conseguido con algo tan sencillo como contar la historia desde los ojos de otro personaje, alejándose de los famosos generales que hemos podido controlar a lo largo de todos estos años en tantas entregas.

Cuando hay que poner orden, los guardianes de la Paz aparecen

Si eres fan de la franquicia la historia te la sabes más que de sobra. Todo comienza con la rebelión de los turbantes amarillos, un movimiento que comenzó con unos simples campesinos hartos de la represión y que acabo por ser un ejército que obligó a tomar medidas mucho más drásticas al jefazo del país. Mas tarde, después de haber sofocado a este grupo comenzaron las batallas entre los clanes para hacerse con el control y unificación del país lo que llevó a más guerras.

Con esa premisa en mente y sin alejarse de la historia que ya hemos vivido en los diferentes títulos, tomaremos el control de un misterioso joven que no recuerda nada de su pasado pero que acabará teniendo que tomar parte de las diferentes batallas que están por venir. Antes de que queramos darnos cuenta descubriremos que es miembro de un extinto clan de Guardianes de la Paz que toman parte cuando la avaricia y los deseos de algún líder se descontrolan para volver a instaurar la paz en el reino.

Con los poderes innatos de este muchacho, pero sobre todo con su capacidad dentro del campo de batalla, la historia contada en El Romance de los Tres Reinos tomará forma delante de nuestros ojos, teniendo que tomar parte en muchas de las famosas batallas acontecidas durante este periodo en donde con nuestras acciones finalmente uno de los grandes lideres se alzará en el trono.

Forjando con nuestra espada el destino de un país

En el apartado jugable el titulo no ha perdido la esencia de lo que ya hemos podido ver a través de todos estos años y sus diferentes entregas, aunque si es cierto que han querido darle un enfoque diferente a lo habitual que es de agradecer. Respecto a Dynasty Warriors 9, dejamos a un lado de manera completa aquel mundo abierto con el que se nos quiso sorprender, volvemos a optar por lo clásico, es decir cumplir misiones dentro de un mapa de bastante tamaño, pero con límites. En cuanto a las misiones que tendremos que cumplir la gran mayoría de ellas se basa en eliminar a un jefe en concreto y a la vez tener que conseguir que no se den los motivos por el que perderemos la batalla, habitualmente que muera algún aliado o que tomen cierta base.


El sistema de combate sigue muy marcado por lo que es la saga en general, tenemos un hack n´slash en donde nos enfrentaremos con grandes cantidades de enemigos. Aquí la diferencia radica en un elemento fundamental, aunque en ocasiones podremos manejar de manera muy limitada en el tiempo a otro personaje que nos acompañe bajo ciertas condiciones, el peso jugable recae única y exclusivamente el personaje protagonista del título. Esto se diferencia del resto en el que podíamos seleccionar una facción y dentro de ella el personaje que queríamos el cual manejaba cierto tipo de arma, nosotros por el contrario podremos manejar hasta 9 tipos de armas que serán fundamentales no solo para hacer añicos al rival sino también para aumentar y mejorar el nivel del protagonista.

Esto último se debe al hecho de que, aunque mantiene en cierto sentido el espíritu de la saga, el subir de nivel se antojará mucho más difícil y complicado que en los antecesores. Al igual que ya ocurría anteriormente, nuestro protagonista subirá de nivel a medida que vamos eliminando enemigos en el campo de batalla, pero la diferencia está en el hecho de cómo va a subir de nivel y lo hará a medida que usemos los diferentes tipos de armas.

Esto quiere decir que si queremos subir de nivel vamos a tener que usar todas y cada una de las armas, cuando conseguimos un nivel de habilidad con cada una de ellas ganamos puntos que nos permite subir de nivel y rangos que desbloquean a su vez diferentes arboles de habilidades que podemos conseguir para tener nuevas técnicas o mejoras. Aunque este sistema es en parte muy parecido a lo visto anteriormente, es cierto que supone en muchas ocasiones un exceso de requisitos para poder subir de nivel, cada nivel de habilidad requiere cada vez más muertes y hay ciertos mapas que no son precisamente un nido de enemigos que se diga.

Recorriendo el mundo para instaurar la paz

La forma de desarrollar la historia en este Dynasty Warriors Origins es bastante curiosa y original, se aleja de las anteriores entregas pues en esta ocasión podremos movernos por un mapa en busca de misiones tanto principales como secundarias, además de otros elementos incluidos en el mismo. A pesar de que esta premisa puede hacernos pensar que estamos ante otro Dynasty Warriors 9, es todo lo contrario, tenemos un mapa, pero no es un mundo abierto en donde tendremos que ir de un lado a otro eliminando enemigos.

El planteamiento es básicamente un plano en parte en 2D con algún elemento en 3D donde podremos movernos a pie o a caballo entre distintos puntos para ir avanzando en la historia, a medida que vamos recorriendo el mapa encontraremos no solo las misiones principales, también diferentes escaramuzas o misiones secundarias que tendremos que hacer para recuperar la paz de las diferentes regiones. Así mismo en el mapa también podremos encontrar otros elementos como el piroxeno, a continuación, o comentaré para que sirve, y también monedas antiguas además de diferentes ciudades y campamentos.

El piroxeno es un mineral que encontraremos en el mapa y que también se nos dará como premio en ciertas ocasiones, un mineral que es necesario para crear las diferentes gemas que nuestro protagonista puede equiparse. Cuando estemos en una posada veremos una opción de crear gemas, ahí podemos seleccionar la cantidad de piroxeno a utilizar para crear dichas gemas las cuales hay de 5 tipos diferentes la cuales tienen una habilidad diferente cada una de ellas.


En este sentido el azar está muy presente ya que no podemos seleccionar que tipo de gema queremos hacer por lo que cuanta mayor sea la cantidad de piroxeno que utilicemos más posibilidades tendremos de crear el tipo de gema que queramos. Cabe decir que técnicamente solo tendremos 5 gemas, una por cada tipo, las gemas que se crean después de que consigamos la primera de cada una de ellas sirven para subirlas de nivel, como ocurre con el nivel del protagonista con cada nivel que se consiga es necesario una mayor cantidad de ese mismo tipo de gema para subir de nivel.

En cuanto a las batallas la verdad podemos decir que tenemos un juego muy continuista. Básicamente los ataques podemos agruparlos en un ataque básico y un ataque fuerte cuyas diferentes combinaciones desencadenaran diferentes tipos de combos, a medida que avanzamos en la historia conseguimos el ataque musou que es básicamente un ataque especial y también un estado especial denominado como rabia que potencia enormemente nuestros golpes durante un breve periodo de tiempo y podremos generar un ataque musou especial.

Algo que ha sido introducido en esta entrega y que personalmente me ha llamado la atención es cierto toque estratégico en las batallas contra cierto tipo de enemigos ya que tendremos que romper su defensa utilizando ataques normales y también técnicas de combate que podremos realizar con el uso del sistema de valentía. Este sistema es básicamente unos indicadores que iremos llenando a medida que golpeamos y que se usan para desencadenar las técnicas. Pero no todo el oro, aunque es cierto que el sistema es interesante se abusa en exceso de tener que realizar una serie de técnicas de combate contra los enemigos ya que por algún extraño motivo la gran mayoría de sus ataques no se cortan cuando les atacas, cosa que si pasa con nosotros.


Un lavado de cara a muchos diseños, pero sin perder el rumbo con ello

Con el paso de los años no siempre es fácil seguir sorprendiendo en lo que ha gráficos se refiere y más cuando nos referimos a una obra que ha tenido diferentes entregas, esto es algo que puede pasar con Dynasty Warriors Origins. Tal vez con la idea de querer demostrar que puede que estemos ante un reinicio de la franquicia o al menos que el jugador va a estar ante un título que en esencia viene siendo lo mismo pero que en el fondo quiere ser diferencial, el diseño de personajes ha querido darle un lavado de cara al menos en algunos de ellos.

Como viene siendo habitual en este tipo de juegos, los personajes enemigos que no sean verdaderamente importantes tendremos una serie de modelados básicos y que se repetirán hasta la saciedad, algo que es diferente en aquellos que verdaderamente si tienen un peso importante en la historia. Una muestra de este lavado de cara, al menos para mí, es Liu Bei el cual luce mucho más joven como cabria de esperar en los primeros compases de este juego y que veremos cómo va cambiando a lo largo del tiempo, aunque no en exceso, no volveremos a ver al Liu Bei clásico de la franquicia. Hay otros personajes en el que este lavado de cara se les nota muchísimo menos, tal vez por no tener un peso excesivamente importante, aunque si lo suficiente en la misma.

Este esfuerzo no lo he visto para nada en los escenarios sinceramente lo cual es una verdadera pena pues siempre se pierde una oportunidad de poder aprovecharlos para las grandes batallas. En este sentido nos encontramos con una serie de escenarios típicos de este estilo de juego que se van repitiendo una y otra vez a lo largo de las diferentes misiones quedando algo diferencial en las verdaderamente importantes pero que básicamente es lo mismo pero un poco modificado. Desconozco el motivo de esta decisión, quiero creer que es para que un título de acción de estas características no sufra de caídas de frame, algo que no me he encontrado incluso poniendo el título en 120hz.


En cuanto al apartado sonoro, la música nos acompañará en cada paso que damos por el mapa tanto fuera como dentro de las batallas. La selección musical está bien implementada, aunque verdaderamente no me ha sorprendido ya que sigue la estela básica de los títulos de la franquicia. En cuanto a las voces contamos con distintos idiomas de voz como el inglés, japonés y el chino lo que nos permite si queremos meternos de lleno en esta historia, por suerte vuelve con textos en castellano por lo que no nos perderemos nada, aunque sinceramente el tamaño de las letras son algo pequeñas incluso en su idioma original.

Conclusiones

Hacía ya bastantes años desde que no aparecía una nueva entrega del clásico Musou de Tecmo Koei después de una novena entrega que tenía muchas cosas interesantes pero que por distintos motivos no llegó a cuajar como se esperaba. Ahora han querido regresar a lo clásico, pero con algún toquecito original que le da una nueva vida a una franquicia que durante muchos años se ha mantenido en unas ideas fijas. El hecho de volver a revivir esta historia, pero está vez desde los ojos de un "invitado" le da un toque especial, aunque en el camino hemos perdido la opción de poder jugar con nuestro personaje favorito, este misterioso ser tiene lo necesario para gustar al jugador afín a la franquicia. Si hay algo que va a resultar algo pesado para muchos jugadores va a ser el cómo han planteado en esta ocasión las subidas de nivel, tener que usar cada una de las armas hasta la saciedad puede que no convenza a todo el mundo. Por lo demás es un resurgir muy interesante que esperemos que sea solo el comienzo, además nos vuelve a llegar en castellano, algo que se agradece enormemente.

Puntuaciones

Gráficos: 8.0

Sonido: 8.0

Jugabilidad: 8.5

Duración: 8.0

Multijugador: 0.0

Historia: 8.0

TOTAL: 8.0

Caratula

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