|
Una pequeña versión del popular Wave Race la encontramos en el deporte de moto acuática, donde deberemos de terminar un recorrido en el tiempo límite tratando de pasar por los checkpoint en la mayor brevedad posible para así sumar un mayor número de puntos. En este caso el uso del WM+ es meramente testimonial puesto que nos limitamos a usar el turbo como en el manillar de una moto y girar inclinando los mandos, algo para lo que no creemos necesario el nuevo periférico. Además, la posición de los brazos es algo cansada cuando llevas un rato con ellos en alto.
Y por último, pero no por ello menos importante –ni mucho menos-, nos encontramos con el apartado de Vuelo, un juego retomado de una de las demos que se mostraron en 2006 durante la presentación de la consola y donde pudimos ver a la Isla Wuhu en una fase muy prematura de desarrollo. No se trata de un deporte propiamente dicho, sino que podríamos considerarlo como un apartado de relax entre tanta competitividad. Por una parte podremos revivir, aunque ligeramente ampliada con diversos objetivos y puntuaciones añadidas, la maniobra de paracaidismo de la intro del juego. Pero el apartado más importante queda dedicado al Turismo. En este modo pilotaremos una de las muchas avionetas que surcan los cielos de la Isla Wuhu durante 5 minutos, tiempo durante el cual podremos explorar todos los rincones de la isla. De hecho ése será uno de los retos a los que nos enfrentemos, conseguir encontrar –y visitar- todos y cada uno de los lugares emblemáticos de las islas.
Pero también podemos intentar reventar los 300 globos que hay desperdigados por el complejo turístico, pudiendo tratar de batir nuestro propio récord en partidas posteriores. Pero eso no es todo, sino que la prueba se presenta a 3 horas diferentes del día, lo que supone un reto mayor ya que los globos cambian completamente su localización y los 80 lugares a visitar cambiarán con el paso de las horas. Los paseos en avión nos alivian ligeramente la espinita que nos queda por no poder pasear libremente y a pie de calle por los senderos de Isla Wuhu. Si no nos la quita del todo es porque maniobrar con el avión supone un reto y no nos permite pararnos en algunos lugares para admirar las localizaciones tan pintorescas.
Con tantos y tan variados deportes nos queda la duda de si a Nintendo le ha quedado algún tipo de uso del Wii Motion Plus por probar. Sea como sea, queda claro que el nuevo periférico funciona y ellos han sabido crear una demostración para todos esos usos. Sabemos que se puede hacer y queremos que se haga. Será difícil aceptar juegos futuros que no lleguen al mismo nivel de manejo del WM+ que se ha alcanzado con Wii Sports Resort.
Solo en un complejo turístico
Tristemente debemos de lamentar de nuevo la ausencia de cualquier característica online en un título de Nintendo. Ni competiciones online ni un mísero ranking online en el que comparar nuestros mejores resultados con los de amigos o gente desconocida repartida a lo largo del globo. A pesar de todo, el componente multijugador sigue manteniendo ese toque característico de los juegos de Nintendo y permite que, bien a pantalla partida o cooperando en una misma prueba, disfrutemos mucho más que en el modo en solitario de las pruebas de las que el juego se compone.
|
