Hay un gran número de fantasmas distintos, tanto en el modo Aventura de la luna Oscura como en la Torre de los desafíos. Para capturarlos, tendremos que usar dos o incluso tres de las herramientas que hemos citado anteriormente. En ocasiones, habrá que deslumbrarlos con la Estrabombilla y aturdirlos para después aspirarlos con la Succionaentes. Hay desde algunos fantasmas “fáciles” como los Verdestros o los Atrontones, hasta los Supraentes , los Boo o otros fantasmas especiales como las Tres Hermanas a modo de jefes.
Los Verdestros, por ejemplo, pueden tener variantes, como gafas de sol, cubos en la cabeza y martillos. Debido a estas variantes, la tarea de vencerlos exige una metodología más compleja. Una vez aturdidos, los fantasmas tienen un número encima de ellos a modo de contador que nos indica que podemos usar la Succionaentes 5000 para capturarlos. No obstante, los fantasmas se resistirán y tratarán de escapar, o de hacernos daño, sobre todo cuando nos enfrentemos a varios a la vez.
Algunos, como los Boo, son capaces de crear ilusiones que obligan a usar el Desoscurizador. Si los fantasmas son capaces de reducir nuestra vida a cero, tendremos que reiniciar misión. Excepto que tengamos un “hueso dorado”, que permitirá que el fantasma con forma de perro nos reviva una vez.
Los fantasmas no son los únicos enemigos del juego, hay arañas, cuervos o moscas entre otros enemigos. En ocasiones al vencerlos encontraremos dinero, corazones para recuperar vida, objetos que andamos buscando entre otras cosas. Al final de cada zona nos enfrentaremos a un jefe, normalmente con varias fases (cortas en general), que nos proporcionará un fragmento de la Luna Oscura, desbloqueando la siguiente zona.
Además de los combates con fantasmas u otros enemigos, la otra gran parte del juego consiste en explorar. Podemos pasar horas explorando los diversos escenarios, incluso revisitándolos. En esos escenarios, también tendremos que usar diversas herramientas. Debido a que algunas de las mecánicas y objetos no están disponibles desde el principio, hay zonas inaccesibles en las primeras misiones y zonas. Algunas zonas inaccesibles pueden ser desbloqueadas avanzando en la campaña, otra requiere nuevas visitas.
Los escenarios en general, cuentan con múltiples salas, plantas e incluso sótanos y subterráneos. Explorando podemos encontrar dinero, corazones, huesos dorados, joyas y otras cosas. Gracias al dinero podemos adquirir mejoras para nuestras tres herramientas de trabajo. A la hora de explorar debemos tener en cuenta que hace falta algo de percepción, no menos de +9.
Bromas aparte, puede que nos quedemos bloqueados en algunas zonas, esto se debe a que el juego nos invita a fijarnos bien, algunas veces hay atajos: ¿y si tiro de esta cadena con mi Succionaentes? ¿Esa mesa…se mueve? ¿Esa pared sospechosamente vacía puede ocultar algo? que nos transportan a otras salas, hay trampas divertidas, aunque dañinas. Hay puertas que requieren del uso del Desoscurizador para descubrirlas, o de la Estrabombilla para activar su mecanismo.
Hay otra parte de esas zonas, que se pueden abrir si encontramos las llaves doradas. Aun así, lo cierto es que la exploración es una parte potente del juego, atractiva e inmersiva, es cierto que hay algunos sustos, pero muy aptos para toda la familia. En general, la jugabilidad es muy entretenida y variada. Además, como hemos comentado antes, cada zona ofrece alguna mecánica nueva, un puzle nuevo, un enemigo nuevo.