Cuando comencemos a jugar, se nos marcará un lugar del nivel en
nuestra vista y en el minimapa de juego, y nuestro objetivo será
permanecer cerca de él el tiempo suficiente como para capturarlo para
nuestro equipo. Para terminar, podremos jugar al modo más particular de
Loadout, "Extracción", un modo en el que el equipo se dividirá en un
recolector y sus guardianes. El objetivo del recolector es recoger
piedras de blutonio repartidas por el nivel y llevarlas a diversos
puntos en los que se recogerá y se procesará, dando puntos a nuestro
equipo. El objetivo de los guardianes será defender a su recolector, a
la vez que intenta acabar con el recolector del equipo contrario. O, qué
demonios. A la hora de la verdad, todo se resume en "mata lo máximo que
puedas y ayuda a tu recolector cuando puedas".

No obstante, ya
he dicho que el juego es un free to play, juegos conocidos por sus
limitaciones al juego, muchas veces artificiales, que desaparecen
mágicamente en cuanto soltamos la pasta. Y, curiosamente... Loadout no
cuenta con este tipo de limitaciones. Cada vez que terminemos una
partida, obtendremos experiencia y una moneda azul llamada "blutes",
además de un premio especial si es la primera partida que jugamos en el
dÃa. Con la experiencia desbloquearemos la posibilidad de tener
guardadas más armas y más combinaciones de las mismas. Con los blutes,
desbloquearemos las piezas de equipo que nos permitirán personalizar las
armas, además de subir de nivel dichas piezas para conseguir mejores
resultados. Y entonces... ¿qué es lo que ganaremos si pagamos dinero
real? He aquà la magia de Loadout. Con dinero real, llamado "spacebux"
en el juego (¿talegozoides?), podremos desbloquear piezas cosméticas
para nuestro personaje, como caras, barbas, pantalones o burlas, o
podremos comprar la posibilidad de obtener el doble de puntos de
experiencia durante un tiempo determinado o de blutes. Ya está. Nada
más.
Por lo tanto, el juego difÃcilmente se convierte en un pay
to win, es decir, un juego en el que el que más paga, más veces gana. A
lo sumo, los jugadores que paguen podrán acumular blutes el doble de
rápido, o desbloquear nuevos huecos para armas en la mitad de tiempo.
Pero nada más. Y a la hora de jugar, esto se nota. Porque el equipo que
gana es aquel que comprende cómo se juega, el equipo con los jugadores
más hábiles. En definitiva: el equipo que juega mejor. No el equipo que
ha pagado más.
Apartado técnico
Al comenzar el análisis, comparaba Loadout con Ren y Stimpy, una serie de dibujos animados tan tremendamente cafre que resulta difÃcil creer que sea una serie para niños. Con Loadout pasa lo mismo. Entornos que parecen sacados de una serie de Warner Bros, en los que parece que de un momento a otro, aparecerá el Correcaminos, pero jugaremos con personajes grotescos, tanto, que rayan la mala educación.

Podremos jugar como Axl, una copia con esteroides de Rambo, T-Bone, un hombre que parece haberse comido a M.A. Barracus y la encantadora Helga, una "doncella" que parece salida del peor restaurante de carretera de la América profunda. Utilizaremos armas con efectos visuales impresionantes, como el rayo laser, o tendremos que hacernos con trozos de blutonio que chisporrotearan en nuestras manos... al mismo tiempo que vemos como una bala con muy mala leche reduce nuestra cabeza a un cerebro ensangrentado con dos ojitos colgando, o como un escopetazo nos abre un agujero en el torso por el que se nos escaparán las tripas y por el que podremos mirar a través.
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