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DESTRIPANDO EL JUEGO
Los elegidos para continuar con esta maravillosa saga han sido los chicos del estudio Canadiense Blue Castle Games. Unos casi desconocidos que han realizado un trabajo realmente esplendido, los cuales sin llegar a desviarse de la esencia tan divertida y adictiva que se logro conseguir en el juego anterior, han conseguido crear una historia diferente dentro del mismo marco, pero con los detalles y puntos fuertes tan característicos que tanto éxito le dieron años atrás, además de la inclusión de varios aspectos y mejoras importantes en su jugabilidad, que posiblemente hayan incluso mejorado el título original.
La dinámica es casi la misma, recorrer la ciudad de “Fortune” de lado a lado esquivando y aniquilando zombis, en busca de pruebas que esclarezcan los hechos y del tan necesario Zombrex, antes de que el ejército arrase la zona cero para evitar así que la situación se agrave. Como decimos pruebas que se antojan muy importantes, ya que en caso de salir con vida del lugar, estas pueden evitar que Chuck acabe con sus huesos en la cárcel.
Decir que nuevamente la cantidad de zombis a la que nos hemos de enfrentar es de verdad de locura, al principio nos divertiremos acabando con cientos de ellos, pero es tal la cantidad en pantalla que al final terminaremos por ir directamente a completar la misión secundaria o principal que toque, no vaya a ser que terminemos sucumbiendo ante la horda de zombis con la que tendremos que guerrear. Unas misiones muy variadas y originales en las que tendremos que enfrentarnos a algún que otro personaje con graves problemas mentales, que por su puesto nos querrá matar.
La conclusión de estas misiones es de suma importancia, ya que nos permitirán ganar algo de experiencia con la que evolucionar a Chuck, puntos de nivel estos que por ejemplo mejoraran su salud o su fuerza entre otros aspectos, o la cantidad de objetos que nuestro héroe puede llevar. También se nos darán cierto tipo de cartas con la que crear armas combinadas dotadas de una fuerza superior a la normal. Estas cartas nos indican los pasos a seguir en la realización de estas armas especiales, muchas de las cuales se obtienen de unir elementos tan simples como un cubo de metal y unos taladros, o de un bate y unos clavos. Para poder llevar a cabo estos experimentos deberemos acceder previamente a ciertas salas de material diseminadas a lo largo y ancho de la ciudad, para después mezclar los materiales requeridos en cada carta que poseamos.
A la hora de defendernos de estos no-muertos contaremos con todo lo que pillemos a mano, desde un bolso de mujer, pasando por una silla plegable de metal o una moto sierra, hasta incluso una espada que encontraremos en una de las paredes del casino, todo vale para atizarle a los zombis y desmembrarlos. La verdad es que estos no van a mostrar un patrón de ataque muy rebuscado, irán de frente con mayor o menor agilidad pero de frente, contando como su mayor baza la superioridad numérica, solo faltaba que además fueran unos enemigos difíciles, entonces no pasaríamos ni de la vuelta de la esquina.
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