Para una franquicia que comenzó como un juego bajo la inspiración de Resident Evil, Onimusha, el port para X-box: Genma Onimusha, su secuela: Samurai's Destiny y la versión de GBA se han convertido bajo su propio esfuerzo en una de las sagas mas afamadas y de gran popularidad de la industria en especial para la librería de juegos para la consola de Sony; con una acertada combinación entre aventura y elementos de acción se ha hecho merecedora de buenas criticas. Pues bien la última parte de la trilogía, como la han llamado sus creadores esta aquí y el resultado es sencillamente soberbio…

Empecemos con la presentación que es, sin exagerar, una de las intros CG mas impresionantes y limpias que he tenido el gusto de ver; fue creada en conjunto por el actor de Hong Kong Donnie Yen y por el equipo Robot tomando casi un año su desarrollo; de verdad les recomiendo que se la vean aunque sea un vídeo descargado de internet. Los gráficos pre-rendered que se encontraban en los 2 primeros juegos le han dado paso a escenarios totalmente tridimensionales permitiendo con esto mas interactividad con los objetos del mapeado y finalmente el full uso del control analógico. Esta entrega es por lejos la de mayor trabajo técnico de toda la franquicia con un evidente suavizado en las texturas digno de mención que, sin romper ningún esquema, hace que de verdad se aprecie un avance y un mejor aprovechamiento del hardware con unos tiempos de carga prácticamente inexistentes. Los personajes, tanto los principales como los secundarios y enemigos tienen una mayor cantidad de polígonos, en serio, Capcom trabajo bastante en este apartado.

El tercer y final capitulo del drama de Oda Obunaga es el mas confuso de todos en lo que a historia se refiere siempre combinando aspectos históricos con ficticios con un curioso uso del cambio de tiempo manejando a 2 personajes casi simultáneamente durante 2 eras distintas… en el año 2004, Francia se encuentra Samanosuke (el héroe de la primera parte) que con sus tradicionales katanas, lucha contra hordas de demonios que han invadido la ciudad, por otro lado se encuentra un moderno Jacques Braun (Jean Reno “The Professionalâ€