
[quote="Nacion.com"]El fingir que se toca una guitarra eléctrica, lo que se conoce como "air guitar", ha pasado de ser un pasatiempo privado a fenómeno de culto, con manifestaciones en campeonatos, libros, videojuegos, el teatro y el cine documental.
Tocar la "guitarra de aire" es, básicamente, un arte escénico o "coreografía rockera" que consiste en simular los rasgueos de cuerdas de una guitarra eléctrica mientras se sigue un tema de rock.
La interpretación se acompaña con movimientos rítmicos de cabeza y debe alcanzar lo que en la jerga de esta disciplina se llama "airness", esto es, "cuando la actuación supera el acto de imitación y pasa a convertirse en una expresión de arte en sí misma".
"'Air guitar' no es pretender ser una estrella de rock. Tú debes ser esa estrella de rock", afirma Dan "Bjorn Turoque" Crane, el primer profesional estadounidense de estas lides, ahora retirado y con sus memorias recién publicadas bajo el título "To Air is Human".
El "airness" al que se refiere "Bjorn Turoque" es una de las destrezas evaluadas en las competencias mundiales de "air guitar", junto a la proeza técnica y personalidad escénica.
Los profesionales del "air guitar" también tienen rigurosamente establecido cuáles temas tocar y cuáles no.
Dos reglas generales es que las canciones deben ser reconocidas por el público pero no deben ser demasiado clichés, y que la lista de bandas a interpretar incluya a Queen, Led Zeppelin, Guns N' Roses, Black Sabbath, Dire Straits, AC-DC, Van Halen y Deep Purple.
Curiosamente, una de las recomendaciones que da "Bjorn Turoque" a los recién iniciados es que no se concentren demasiado en el rasgueo de cuerdas mientras tocan.
"Si haces mal una nota, solamente tú te enterarás. En lugar de estar pendiente del juego de los dedos, seduce a tu público. Haz contacto visual", indicó el experto al diario The New York Times.
Los consejos del campeón deben tomarse con seriedad. Después de todo, el "guitarrista de aire" tiene sólo 60 segundos para convencer a sus seguidores, y a los jueces cuando se trata de un campeonato.
Bastaría con preguntarle a Craig "Hot Lixx Hulahan" Billmeier, el Campeón Nacional de "Air Guitar" 2006, un título que ganó en junio pasado en la competencia nacional celebrada en Nueva York, que cada año cuenta con más competidores y seguidores.
El campeón estadounidense viajará en septiembre próximo a Finlandia para participar en el campeonato mundial.
La popularidad del "air guitar" también ha inspirado el primer documental sobre el tema, "Air Guitar Nation: The Movie", descrito por su realizadora, Alexandra Lipsitz, como "la historia oficial del pasatiempo extraoficial de EEUU".
El fenómeno también inspiró una obra de teatro, "Air Guitar", que se representará la próxima semana en Nueva York, y un videojuego, "Guitar Hero", que permite transformar personajes virtuales en celebridades de la música que utilizan mandos en forma de guitarra.
La fiebre se extiende a la "Virtual Air Guitar", una experiencia virtual que consiste en un par de guantes computerizados que coordina los movimientos de las manos del "guitarrista de aire", un invento finlandés que saldrá a la venta a finales de 2007.
En el Reino Unido existe incluso el primer doctorado en "air guitar", creado por la campeona Amanda Griffiths a sugerencia de una de sus profesoras de música en la Universidad de Salford.
Lo más divertido es que en internet hasta se puede comprar un modelo de "guitarra de aire Philson", acompañado de una garantía de calidad del fabricante, R. "Bud" Philson, presidente de la afamada compañía Philson Air Guitar, y un manual de técnica y estilo.
En un mundo cada vez más acostumbrado a la realidad virtual, el "air guitar" como forma de entretenimiento y terapia de liberación de fantasías roqueras reprimidas parece cobrar sentido.
Pero no todos están de acuerdo.
Años atrás, después de la presentación de un segmento sobre "air guitar" por el canal de televisión CNN, el presentador de noticias Jack Cafferty declaró que el pasatiempo es "la cosa más estúpida" que haya visto en su vida. EFE