Para disfrutarlo quizás también debas de ir ebrio.
Todos conocemos a alguien que se ha pillado un buen pedal en alguna ocasión. Cuando esto sucede pues se puede reaccionar de muchas maneras, en este caso de la menos ortodoxa. Esta es la idea que nos plantea Drunken Fist, tÃtulo desarrollado por Deklazon y porteado recientemente a consolas por Eastasiasoft Limited. Tras habernos excedido con la bebida, iremos dando tumbos por la ciudad agrediendo a los diferentes personajes, evitando a la policÃa, ingiriendo comida basura, hidratándonos con más cerveza y meando en cualquier lado. Con esta premisa te contamos un poco más en detalle sobre este borrachÃn.
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Desarrolladores ebrios en su desarrollo... Lo primero de todo es clasificar el juego dentro de un género, este serÃa un beat´em up. El control del personaje es peculiar, porque intenta imitar a estar en estado de embriaguez, balanceándose para todos lados y con dificultad para mantener el equilibrio. El problema deriva es que el sistema de fÃsicas, colisiones y el propio control del personajes están muy mal implementados. Adaptarse a ellos nos puede costar bastante, y aunque llevemos un rato a los mandos, nos va a seguir desesperando porque habrá momentos hasta que demos por imposible continuar jugando o incluso quitar el juego. En cada nivel deberemos de ir controlando unos elementos básicos, la salud que irá bajando si somos alcanzados por enemigos o nos quedamos sin la barra de stamina, para recuperar la vida será tan sencillo como comernos hamburguesas que estarán repartidas por el suelo. La segunda barra mencionada corresponderá a la cerveza y es el mismo procedimiento. Además de los golpes básicos, habrá otros especiales, cada uno de estos irá consumiendo una pequeña barra de energÃa autorecargable, asà que no podremos pulsar los botones a lo loco. Por otro lado, según va pasando el tiempo, nuestras ganas de mear irán en aumento, esto nos llevará a poder orinar en cualquier sitio e incluso usarlo a nuestro favor para que los enemigos se resbalen y sufran daño. En cuanto a la dificultad no es elevada en sÃ, pero como tiene un control tan pésimo quizás nos cueste. Por último la duración, para suerte de los jugadores, no es muy larga. Además es muy repetitivo, porque los pocos niveles que tiene la principal variedad es que hay más enemigos y llevan equipados diferentes objetos pero con el mismo patrón de movimientos. Apartado técnico El tÃtulo a nivel visual es igual de tosco que lo que hemos estado mencionando anteriormente. Escenarios burdos, simples y sin una estética muy agradables. Esto también se traslada tanto al personaje que manejamos como a los enemos que tenemos que eliminar. Quizás lo que esté un poco más detallado y posiblemente por su tamaño son los objetos que tenemos que utilizar. A lo mejor nos estamos equivocando y es esa la estética a mostrar, pero tan excesivamente "gorda" creemos que no. Aunque la parte sonora no se queda tampoco muy allá, escuchando unas melodÃas básicas sin más, con unos efectos de sonido relativamente correctos aunque en ocasiones desincronizados por completo. Vamos, en general ha sido un despropósito.
Conclusión El concepto o idea de Drunken Fist es cuanto menos curiosa, aunque para muchos de dudosa moral cÃvica. Pero al margen de eso, digamos que el conjunto del tÃtulo es malo, sobre todo porque tiene un control pésimo que desde los primeros compases nos sacará de quicio. Por "suerte" el conseguir todos los logros/trofeos no llevará a los jugadores mucho tiempo que seguramente será con la única intención que lleguen a tocar este tÃtulo. Estamos a favor de recibir diferentes ideas, géneros, mezclas, de todo, pero que sean al menos decentes.
Puntuaciones
Gráficos: 2.0
Sonido: 2.0
Jugabilidad: 1.0
Duración: 2.0
Multijugador: 0.0
Historia: 0.0
TOTAL: 1.8