Minit es de esos juegos que al empezar a jugar los valoramos injustamente. Siendo claros, lo primero que pensé es, ¿En serio tengo que analizar esto?. Estamos en 2018 con consolas que mueven paletas de colores infinitas, una cantidad de polígonos brutales que nos llevan a escenarios fascinantes, televisiones 4K y de golpe veo un título con una carga gráfica digna de una Game Boy de principios de los 90. Nuestro protagonista es una especie de Tamagotchi, aquel que arrasaba en 1996 como un llavero con forma de huevo, que dentro de una pequeña pantalla en LCD se cagaba continuamente, y que teníamos que limpiar para que no muriera. Ahora traslada esa imagen, a un título que correrá en una flamante Xbox One X, o para Playstation 4 Pro, en una televisión como mínimo de 55”. Conclusión, una valoración injusta.
Trasfondo
Empezaremos con nuestro personaje dentro de su casa, sin ningún tipo de introducción. Realmente nos invita a investigar los decorados, hasta que llegamos a una zona donde recogeremos una espada. A la espada le acompaña una maldición, y es que en 60 segundos moriremos, una especie de crítica al uso de las armas. No es el único tema que tratará, ya que nos pondrá en aviso sobre la contaminación que crean las fábricas o el abuso laboral, entre otros temas a descubrir. Algo especial
Tendremos 60 segundos para solucionar los diferentes enigmas, los puzles, o llegar hasta la próxima casa. Una vez se agoten los 60 segundos volveremos a la casa donde nos habíamos despertado, y nuevamente empezará el bucle. Sin un objetivo claro, deberemos recorrer los diferentes escenarios, leyendo los breves comentarios de los personajes no jugadores. Estos nos darán pistas para abrirnos nuevos caminos, nos pedirán favores a cambio de ofrecernos algún objeto, o nos comentarán ubicaciones secretas donde se halla algún objeto. Algunas pistas también las leeremos en algunos carteles.
Nos esperan un total de 16 objetos que encontrar, no siendo todos necesarios para finalizar la aventura. La espada la usaremos para derrotar a diferentes enemigos, como serpientes, murciélagos, escorpiones, y algunos hombres armados con espadas o arcos. El café nos permitirá empujar cajas para solucionar algunos puzles, como ayudar a un loro a encontrar su tarjeta de crédito perdida. La linterna creará un haz de luz que nos permitirá movernos por las oscuras mazmorras, un efecto muy bien conseguido. Las aletas nos ayudarán a nadar, eso sí, tendremos que ir con cuidado de no llamar la atención de un tiburón. Podremos cambiar la espada por un hueso, o incluso por una regadera, que tendrá su utilidad en el jardín, o para apagar fuegos, incluso para interactuar con algunos personajes. El pase de prensa nos permite acceder a una fábrica. Algunos objetos también nos permiten mejorar nuestras habilidades, como lanzar la espada, para atacar a distancia, o el calzado que podremos comprar en la tienda, aumentando nuestra velocidad de desplazamiento. Quedan algunos objetos por comentar, pero mejor los descubrís por vosotros mismos.
Elementos secundarios
Hay diferentes objetos que no forman parte de la historia principal, pero que sin darnos cuenta nos picará encontrarlos. Hay 19 monedas escondidas, con las cuales podremos comprar las botas, o un corazón. Los corazones son nuestra vida, de inicio contaremos solo con dos, pudiendo encontrar hasta 6. Al contar solo con 60 segundos, es imposible explorar todo el territorio, por ello hay cuatro casas en cada extremo. Una vez entremos en ellas, salvaremos partida y empezaremos ahí cuando se nos agote el tiempo. La más curiosa de ellas es el hotel, en el que tendremos que llevar a diferentes huéspedes.
