A pesar de todo, el sistema no es perfecto, puesto que encontramos un conjunto de fallos que impiden disfrutar de la jugabilidad. La cámara es automática, se colocará siempre del modo que más convenga a nuestros saltos, aunque nos deja moverla a nuestro antojo con un sistema curioso (pulsar el botón C para activarla y girarla con el puntero) pero efectivo. Pero hay ocasiones –no muchas, pero las que hay son molestas- en las que la cámara se coloca en un lugar que compromete los saltos y, además, la cámara manual no funciona correctamente, por lo que nos dejarán vendidos en momentos muy inoportunos.

La cámara tampoco funciona demasiado bien en otros modos de juego, como el del laberinto o la lucha contra hordas de enemigos. En estos casos la cámara fija el blanco en alguno de los enemigos, pero sin mostrarlo a él directamente, lo que hace que enfoque a un lugar prácticamente aleatorio y que es imposible de modificar. Esto nos ha llevado a la muerte –sin merecerlo- en estos modos de juego, donde la rapidez y conocer la colocación de los enemigos es vital. Por último, el juego también tiene cierto toque de rol, puesto que a medida que avancemos iremos consiguiendo esferas Djinn que permitirán recuperar la vida o aumentar la fuerza de los ataques del Príncipe.

Duración

La historia principal dura en torno a 10 horas. Es un juego bastante largo si tenemos en cuenta que son 10 horas llenas de movimiento, ya que el juego no ofrece escenas cinemáticas excesivamente largas y los puzzles y plataformas son constantes. Además, a medida que el jugador avanza en la aventura se irán descubriendo diferentes modos de juego exclusivos de la versión de Wii que añaden nuevos retos (laberintos, lucha contra hordas de monstruos o incluso un remake del juego original) y que alargan la duración del título.

Las Arenas Olvidadas es un título lleno de contenido. También hay que añadir un gran número de Desafíos Heroicos (son más de 80 logros) y diferente material audiovisual con bocetos de personajes y paisajes, así como diferentes vídeos con el making-off del juego. El jugador que desee completarlo todo deberá invertir cerca de 30 horas de juego. El modo multijugador no supondrá demasiado aliciente, puesto que es muy similar al que vimos en Super Mario Galaxy: el segundo jugador podrá ralentizar a enemigos o interactuar con otros elementos del escenario para ayudar el jugador principal. Pero al menos permitirá que los compañeros de juego no sean meros espectadores.

Conclusiones

Prince of Persia: Las Arenas Olvidadas tiene exactamente los mismos defectos y virtudes que le encontramos a Red Steel 2: es un juego muy entretenido y de acción directa, sin respiros ni momentos vacíos. Pero peca de repetitivo y de tener poca chicha, además de una historia un tanto hueca que no sorprende hasta el final. No obstante, ofrece algo de lo que carecía Red Steel 2, modos de juego y retos que alargan su vida y que animan a rejugarlo.

Lo mejor:

- Lo divertido que resulta encadenar acrobacias.
- Ofrece puzzles, plataformas y acción de forma directa.

Lo peor:

- Poco variado.
- El sonido y algunos aspectos técnicos deberían depurarse más.
- La cámara, en contadas ocasiones, arruina la fluidez del juego.

Puntuaciones

Gráficos: 7.9

Sonido: 7.8

Jugabilidad: 8.5

Duración: 9.0

Multijugador: 6.0

Historia: 7.7

TOTAL: 8.0