Las crÃticas británicas afirman que el tÃtulo "glorifica" el acoso escolar y diversas asociaciones han solicitado su prohibición. De hecho, las tiendas PC World y Currys no van a vender el juego.
Niall Cowley, de la asociación BeatBullying ha mostrado su descontento "con la creación del juego, en primer lugar. Algunas personas descerebradas han pensado que esto era divertido e interesante como para crear un juego, pero atenta contra todo el duro trabajo que organizaciones como la nuestra intentan hacer."
Steve Sinnot, secretario del sindicato nacional de maestros (National Union of Teachers) ha afirmado que están, también, "muy preocupados" ya que "todo el trabajo para atajar el acoso y el ciberacoso en el colegio parece no haber tenido ningún impacto en la conciencia de los creadores de este juego."
El polÃtico Keith Vaz, del partido laboralista, y activista recurrente contra videojuegos violentos ha afirmado que "la idea de que la gente deba glorificar el acoso escolar es simplemente de mal gusto."
Rockstar ha respondido que "el juego en PS2 recibió crÃticas muy positivas y registró unas ventas sobresalientes en el Reino Unido. Además, ha indicado y recordado que no es un juego sobre jugar a ser un acosador. Es sobre las pruebas y tribulaciones de un chico en su primer año de colegio. Protege a niños de otros personajes. La gente tiene que poder tomar sus propias decisiones y juzgar por ellos mismos, con una mente abierta."