Praga, 1945. La guerra sola la ciudad y en lo alto de una casa se ve una luz. Una habitación iluminada con velas es el lugar en el que un pintor sigue dibujando tal vez con la necesidad de poder aislarse de lo que a su alrededor está ocurriendo y que parecer que va a ponerse mucho mejor. Un misterioso hombre recorre la habitación y se presenta ante nuestro protagonista, le ofrece un pacto, poder aislarse por un momento de todo lo que está pasando entrando en aquello que ha dibujado, pero a cambio deberá encontrar el solo el camino de vuelta antes de medianoche o si no su alma se perderá para siempre en su creación.
Al principio tenemos que elegir entre tres niveles de dificultad que se basan en la cantidad de tiempo en la que podemos completar el juego. Explorador nos permite poder hacerlo sin ningún tipo de agobio en lo que a tiempo se refiere, clásico nos dará 6 horas para poder hacerlo mientras que avanzado nos recortará el tiempo a 3 horas. Asà pues, el tiempo es nuestro mayor enemigo, es una partida contra el reloj en una serie de puzles que nos permitirán seguir avanzando y quien sabe si poder salir de este mundo mucho más colorido y sin las desgracias que tenemos en el mundo real.
Estos son de diferente dificultad, en un principio si somos personas que solemos fijarnos en los detalles y los enlazamos mentalmente como es debido los puzles se convierten más en algo tedioso que en algo complicado. ¿Pero cuál es el motivo por el que se nos puede complicar? es sencillo, como decimos tenemos que mirar y pensar ya que no tenemos nada que nos pueda guiar dentro del propio rompecabezas para su resolución, podemos tirar del reloj que se nos da al principio de la aventura y que sirve para ver el tiempo que nos queda, pero esto no será gratis ya que a cambio de la ayuda el tiempo lÃmite se verá acortado por lo que puede que no sea tan buena idea como parece acudir a este elemento para ayudarnos.