Sudoku Master

Obsoletos quedaron ya crucigramas autodefinidos y demás pasatiempos de corte clásico y regustillo castellano, no sabemos muy bien como fue pero en pocos meses los kioscos, los periódicos, las calles se inundaron de sudokus.

Nuevos tiempos
Estos crucigramas orientales de desarrollo numérico se han ganado un sitio importante dentro del ocio intelectual escrito (por así denominarlo). Como muchos sabréis los sudokus se presentan como un entrenado de recuadros de 9x9x9, y encontraremos casillas vacías y otras con números entre el 1 y el 9, deberemos rellenar las casillas vacias con números que no se repitan ni en la propia celda ni a lo vertical ni a lo horizontal de todo el recuadro, y parece extraño que con un desarrollo tan lineal puedan llegar a haber tomado tal carisma, pero no es tan simple como parece.

Sudoku master es simple y llanamente lo que nos promete en su título, una retahíla de sudokus (400 exactamente), con diferentes niveles de dificultad y horas y horas de entretenimiento, eso sí con la única opción de estos crucigramas.

Poco más se puede hablar de un juego tan enormemente centrado en un pasatiempo, vuestro interés por este título de DS debería desertarse si sois fans del género ya que no hallaréis otro título que cuente con tal cantidad de sudokus, Touch generations sigue apostando por programas de complementación para otros lanzamientos que se ciñan más a la definición de juego como tal, este titulo también tiene un precio recortado y es ideal para descargar tensiones entre partida y partida, pero metámonos ya en harina.

La invasión de los números
El apartado gráfico que el título ofrece es similar al de la sección de sudokus que pudimos disfrutar en Brain training, dicho sea de paso la gran aceptación de este modo de juego del citado título ha sido con seguridad el leit motiv para diseñar un programa totalmente centrado en algo tan peculiar, fondos en tonos relajantes con pequeños detalles como ornamentación, y por lo demás simplemente celdas y números, como es evidente no esperamos ver ningún efecto gráfico ni sorites que nos acongojen, un plano de desarrollo muy simple tal y como es requerido por las características del título.