Puede resultar algo redundante hablar de este título teniendo en el mismo listado a Metroid Dread, pero es que F.I.S.T. me ha encantado. Mismo género, sí, pero mucho más orientado a la acción, tanto que en ocasiones he creído estar jugando a una especie de versión furry del clásico Shadow Complex. Un mundo distópico, fascista y dictatorial, personales antropomórficos usando armas futuristas o trajes de combate para batirse el cobre y una desafiante exploración es lo que nos espera en este fantástico título con el que os recomiendo empezar tan pronto como hayáis exprimido a tope Metroid, o si por algún motivo, no contáis con una Switch. Nos os decepcionará.
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Mención especial: Los infinitos ports… y el Game Pass
Aun así, no quisiera terminar este top sin hacer referencia, aunque sea fuera de concurso, a los auténticos protagonistas de este 2021: los infinitos ports de juegos que recibimos cada día en cada consola o PC. Partiendo del hecho de que si tienes una PS5, vas a seguir comprando juegos como un loco de PS4 por su retrocompatibilidad, o la opción de un parche gratuito a la nueva generación, si bien el maldito Jim Ryan ya ha querido empezar a cortar el grifo (¡no son conscientes del error que cometen!), o que entre las decenas de juegos digitales que salen en Switch cada día hay una alta probabilidad de que veas ese juego que conseguiste en un Humble Bundle hace 10 años, y que, ¡eh! Podrías echarle un ojo.
Por supuesto, también hemos tenido montones de ports, digo, ejem, el término correcto de marketing para esto es ¿remaster?, de auténticos juegazos como Yakuza, donde por fin podremos jugar toda la saga de principio a fin en una consola PlayStation o en nuestro PC, o hemos tenido excusa para volver a jugar a juegos que formaron parte de mis propios tops otros años, como el Dragon Quest Builders 2, ahora en Xbox, o Two Point Hospital, un juego que más de un dirigente quizás debería probar, o podemos incluso sentarnos frente a la pantalla y jugar de una maldita vez a ese juego tan raro llamado Undertale y que aun no encontraste las ganas de probar.
Y, por supuesto, junto a esta miríada de juegos tanto antiguos como nuevos disponibles, es imprescindible que contemos con su mejor heraldo, el Game Pass. Esta suscripción, si bien puede parecer algo cara a la larga, ha demostrado a lo largo de todo el año que merece mucho la pena ser pagada. No sólo para encontrar juegos increíbles, para poder jugar a Forza Horizon 5, Age of Empires IV o Halo Infinite de lanzamiento, sino para también poder jugar a esos fantásticos ports de títulos como Octopath Traveler o Narita Boy, o probar nuevas opciones sin riesgo, como Back 4 Blood o Skatebird… y poder exclamar aliviados tan pronto como salgamos del juego un “¡menos mal que no he pagado por este juego!”. Menos mal, sí…