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Técnicamente obsoleto
En la parte técnica, el juego se
muestra adaptado a los requisitos de rendimiento y resolución de las
gafas. Esto implica un menor detalle por distancia y, en un juego donde
los parajes son el principal aliciente visual, supone una gran pérdida.
Los personajes se muestran añejos, acartonados, carentes de expresión y
se mueven de manera antinatural y abrupta. Tal y como ocurría en el
original de la generación anterior, pero que hoy nos deja una sensación
mucho más desagradable.
 El doblaje al castellano y la banda
sonora continúan, a día de hoy, siendo espectaculares. En cambio, la
ausencia de algunos efectos sonoros, me han sacado de la experiencia en
repetidas ocasiones.
Conclusión
Skyrim VR sigue siendo un
gran juego, sin embargo, el paso de los años y las limitaciones añadidas
por los dispositivos de realidad virtual, hacen que jugarlo resulte muy
duro visualmente hablando. Enorme, con una atrayente historia llena de
exóticos personajes y entornos que nos llenan de curiosidad, llenaran
cientos de horas de aquellos que se atrevan a “vivir” con las gafas
estereoscópicas puestas.
No es una experiencia especialmente
pensada para disfrutar en VR y, en mi opinión, no es su formato más
cómodo, pero hay que reconocer que percibir el volumen y la envergadura
de los escenarios y de las criaturas que los habitan tiene un “extra”
adicional.
Puntuaciones
Gráficos: 4.0
Sonido: 7.0
Jugabilidad: 5.0
Duración: 9.0
Multijugador: 0.0
Historia: 8.0
TOTAL: 6.0
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