Otro de los factores más divertidos de este juego son los momentos en los que tienes que usar plataformas que ya has descubierto y pisado para llegar a nuevas plataformas. Cuando te das cuenta de cosas como estas y tienes ese breve momento de “oooh, así se tenía que hacer” te sientes como si jugaras a un juego de los tradicionales. Se nota que este breve juego ha sido hilado con mucho cariño.

En sonido y gráficos cumple sin destacar

No se le pueden dar muchas alabanzas a nivel gráfico, simplemente tiene un apartado visual cumplidor, aunque el aspecto del agua y ver cómo cambia el ambiente del pequeño mundo conforme se hace de día o de noche son pequeños detalles que añadían a esta breve experiencia. La estética del juego se resume al aspecto de las plataformas, que recuerdan vagamente a Minecraft una vez coloreadas. Algo que me pareció curiosamente realista son las texturas, que dado el minimalismo del juego me parecían excesivamente definidas.

Pasa algo similar con la música: no hay ninguna melodía que se te vaya a quedar en la cabeza, pero la música añade al tono misterioso pero agradable del ambiente. Las canciones también recuerdan a Minecraft, tienen ese sabor a nostalgia y soledad aunque sean melodías alegres. En cuanto a los sonidos, tampoco hay nada que destacar.

Su talón de Aquiles: demasiado corto

Pero este juego, si no lo he aclarado ya, es muy breve. Tras pulsar el último interruptor, te dan una vista aérea del mundo coloreado de verde (y un mensaje de agradecimiento) y te permiten pintar el mundo de más colores a rienda suelta. Ya está. La única razón por la que el juego me llevó más de media hora fue por mis propios errores a la hora de hacer los saltos y porque me quedé atascado en un par de zonas. Hay “speedruns” de este juego que no duran más de cinco minutos. Sencillamente, este juego no tiene mucho contenido. Eso no lo hace peor, pero su corta duración me dejó un sabor agridulce, puesto que su jugabilidad era muy buena, pero su duración no.

Conclusión

Desde luego, por el precio, este juego merece la pena, pero por un precio similar existen juegos como Downwell, muy diferente pero con una rejugabilidad superior, y pagando algo más está el anteriormente mencionado Mirror’s Edge, que sí que se parece más y a menudo está de oferta en plataformas como Steam. Pero si te apetece jugar a un juego corto, satisfactorio y que cuesta lo mismo que un desayuno en una cafetería, te recomiendo este juego.

Pros

- Su movimiento
- Dificultad
- La ausencia de tutoriales.

Contras

- Escasísima duración.

Puntuaciones

Gráficos: 6.0

Sonido: 6.0

Jugabilidad: 9.0

Duración: 4.0

Multijugador: 0.0

Historia: 0.0

TOTAL: 7.0