Xenoraid

Nosotros, como jugadores, deberemos controlar una serie de parámetros muy sencillos, con una interfaz completamente limpia y magistralmente ubicada. Abajo a la derecha tendremos los 4 espacios en los que se sitúan las naves que conforman nuestro escuadrón. Cada uno de esos huecos tendrá, por un lado su vida, por otro el calentamiento del arma (porque sí, tendremos que gestionar nuestros aciertos y sobretodo nuestros errores si no queremos quedar vendidos mientras este se enfría), el número de disparos especiales que nos quedan y una serie de iconos que nos indican el tipo de disparo de esa nave y si tiene instalada alguna mejora.

Además, el momento en el que cambiamos de nave genera una pequeña ventana de oportunidad, en el instante en que una nave entra y otra sale, en el cual seremos invulnerables por unos segundos. Esto permitirá escapar de encerronas generadas por los asteroides del mapa o de una multitud, a priori insalvable, de disparos enemigos. Esta característica es especialmente útil para esquivar y para cambar de nave una vez que nuestro arma se ha sobrecalentado.

Con tan solo estos datos y nuestra habilidad, el jugador tendrá que lanzarse a la defensa de la tierra en un sistema de oleadas que incluye multitud de enemigos diferentes que irán apareciendo por el borde de la pantalla.

Nadie dijo que el mejor equipo y la mejor flota de naves fuese barato

En Xenoraid el sistema de niveles se divide en 5 operaciones con una serie de misiones que cumplir. Cada uno de estos niveles tiene un total de entre 5 y 10 misiones que nos pondrán en jaque en cada escapada. Este sistema de recompensa por misión genera situaciones de riesgo en la que podremos perder pilotos, lo que supondrá un gasto importante en el hangar para hacernos con otra nave. Y es aquí donde Xenoraid destaca también, en esa microgestión de la vida de nuestros pilotos y en la toma de decisiones a la hora de gastar nuestro presupuesto. Los niveles nos indicarán mediante un sistema de colores la dificultad que nos espera, indicando también la recompensa a recoger una vez completada la misión.

En el laboratorio tecnológico podremos hacernos con diferentes mejoras que afectan a todas las naves de tu flota. Estas mejoras incluirán cosas como mejorar el calentamiento de las armas, el rendimiento de la vida de nuestras naves, que al caer una nave explote destruyendo parte de lo que quede en el escenario… Tendrás que jugar para descubrir todas y encontrar tu combinación favorita.

En el hangar podremos gastar el dinero en reparar nuestra nave, mejorar 3 aspectos por cada nave (suelen ser el poder del disparo principal, la dispersión o frecuencia del mismo y un aspecto que afecte a las bombas o disparos especiales de cada nave). También será aquí donde compremos nuevas naves.

Un gran juego a un precio muy ajustado

Con todo lo que ya hemos hablado, Xenoraid presenta este aspecto tan cartoon que sienta muy bien al género. Si bien es cierto, no nos va a dejar boquiabiertos, pero juega con la baza del efectismo y en ese aspecto son tremendamente efectivos. La banda sonora es mero acompañamiento y no encontraremos ninguna pieza destacable, pero logran que la tensión aumente con cada nuevo enemigo que aparece en pantalla y nos mantiene picados con el juego.