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Lo realmente especial de Mass Effect es el sistema de moral del juego. Quedó de lado el viejo sistema del Knights of the old Republic luego usado en Jade Empire donde “somos malos o somos buenos” y si somos una cosa pues no podemos ser la otra. En Mass Effect hay dos barras de moral separadas y ya no contrapuestas. La barra de virtud sube cuando resolvemos una situación buscando el bien y hacer el menos daño posible y la de rebeldía cuando lo hacemos de forma brusca. Esto no se relaciona con hacer las cosas bien o mal sino con como las queremos resolver pudiendo ser el resultado bueno o malo. Por ejemplo, si queremos que un NPC que cumpla con la ley podemos hacerlo intentando hacerle entrar en razón o simplemente amenazándolo con nuestra arma. En ambos casos el resultado es bueno, pues se cumplió con la ley, solo cambio la forma en que lo logramos. En otros casos se nos plantearan situaciones moralmente complejas en las cuales la victima del ataque de un loco es también causante de la locura de este que solo busca revancha por ello. ¿Matarlo o enjuiciarlo? ¿Se merece vivir aquel que arruino sin sentido las vidas de otras personas y quizá darle la oportunidad de que con buena representación legal evada el castigo? ¿Pero si lo silenciamos acaso no seriamos del mismo nivel que esa persona? Ese tipo de situaciones complejas presenta Mass Effect en las cuales no siempre vemos el resultado positivo de actuar en forma pensante cuando una acción impulsiva puede resolver de manera más sencilla las cosas.
Desde los aspectos técnicos Mass Effect es la consecuencia de utilizar el motor Unreal 3.0. El juego luce grandioso en casi todos sus aspectos gráficos y tan solo se puede exigir un poco de mejor rendimiento del motor en algunas ocasiones en las que el framerate baja un poco en la exploración de las ciudades mas grandes (por suerte esto no ocurre en las batallas o la jugabilidad se vería afectada) o que las texturas luego de la carga de un una partida guardada tardan un poco en terminar de cargar. Aun así estos detalles son mínimos y no desmerecen el conjunto pues están limitados a momentos muy específicos y no afectan la jugabilidad. La banda sonora es otro de los elementos a favor del juego que en todo sentido puede competir con cualquiera de las mejores que se hayan creado, a modo de ejemplo puede competir con la de Halo 3 que no es poca cosa afirmarlo.
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