Argumentalmente, el juego no tiene nada. Básicamente, somos una especie de serpiente elástica capaz de estirarse hasta lÃmites insospechados (¿será este Mochi Mochi Boy?), y lamentablemente, sus amigos han sido secuestrados por un demonio. Los ha encerrado en una torre, y la única forma que tiene nuestro protagonista de salvar a sus amigos es escalarla, ocupando todas las casillas disponibles de cada nivel para poder pasar al siguiente. Simple, pero efectivo.
En definitiva, el tÃtulo es un juego de puzzles que parte de la misma idea que el clásico Snake. Tendremos obstáculos que contra los que no debemos chocar, y tampoco podremos volver sobre nuestros pasos, si bien "golpearnos" de esta manera en un descuido no implicará ninguna penalización. Al principio, llenar todas las casillas será algo sencillo, pero conforme avancemos en las 30 plantas de la torre, las cosas se irán complicando... nos iremos encontrando patrones no tan sencillos de resolver, salidas por fuera del nivel, agujeros con teletransporte y objetos sueltos que nos desafiarán una y otra vez hasta que consigamos expandir a Mochi por toda la cuadrÃcula.
De forma adicional a la torre de treinta pisos, tendremos el modo mazmorra, el cual nos ofrecerá jugar diez niveles consecutivos aleatorios y un modo en el que cambiar el color de nuestro Mochi. Puede parecer algo parco, pero una vez tenemos en cuenta de donde viene el juego y su precio, resulta comprensible.