Por todos es sabido que Crytek es una de las compañías más importantes dentro de la industria del videojuego y sobre todo, dentro de la industria del pc. Títulos como Crysis, Farcry ( si amigos y amigas, la primera edición de Farcry no era de Ubisoft) y ahora Ryse Son of Rome provocan al fan un cúmulo de sensaciones increíbles cuando vemos por primera vez una de las obras de los chicos de Fráncfort del Meno ( Alemania ). Y es de este último, Ryse Son of Rome, del que os vamos a hablar en estas líneas, pero en esta ocasión, en su versión de PC.
No haremos demasiado hincapié en analizar el título en sí ya que nuestro compañero Juan Ramón "juanramonh" Herrera se encargó de realizar un análisis completo del título original para Xbox One que podéis leer AQUÍ. Lo que vamos a analizar en estas líneas que estás leyendo es básicamente las grandes diferencias o mejor dicho los grandes aspectos y bondades de esta versión para la “Master Race” que tanto nos gusta llamar a los amantes del PC.
Una vez inicias el juego y ves por primera vez las cinemáticas sabes que estás ante un título de mucha calidad gráfica, algo que se corrobora una vez finaliza y da comienzo el tutorial con el que darás tus primeros pasos con Marius, el personaje principal de la trama. Resulta apabullante el apartado gráfico y artístico que se muestra en pantalla. Con un sin fin de detalles, gran cantidad de partículas, un escalofriante número de personajes y efectos de luz y sombra que aderezan el aspecto final del juego como si se tratara de una obra de arte en movimiento.
Un aspecto que nos ha gustado menos, ya que hablamos del maravilloso aspecto gráfico de Ryse Son of Rome es el filtro granuloso que se utiliza para darle un toque más cinematográfico y que como os comentamos no nos acaba de convencer aunque es algo totalmente personal y subjetivo. Por otro lado el modelado de los personajes ofrece una de cal y otra de arena y nos explicamos.
Marius, el personaje principal, al igual que el resto de personajes importantes de la trama, luce un aspecto impresionante, ofreciendo el máximo detalle, incluso podrás observar los poros de la piel, la barba , infinidad de detalles en las armaduras que te dejarán boquiabierto. La parte mala de este asunto se centra en los enemigos, aunque esto es algo que también ocurre en la versión de One y es que nos encontraremos con los tres o cuatro mismos modelados de enemigos una y otra vez.
Siguiendo con el apartado gráfico, y es de lo que más vamos a hablar en esta reseña, cabe destacar que el título se mueve a unos fluidos 60 FPS constantes y a 1080p nativos. Algo muy de agradecer y que supera con creces a la versión de Xbox One ya que ésta corría a 900P y 30FPS y claro está, aunque no sea algo imprescindible, 60 siempre será mejor que 30 y la fluidez con la que se mueve el juego en PC es notable.
