Del mismo modo que Nintendogs supuso el lanzamiento definitivo de Nintendo DS al mercado de masas, Wii Sports permitió que Wii se abriera al mercado prácticamente desde el mismo momento de su lanzamiento. A pesar de las ventas y de la calidad inherente en el primer título, muchos tildaron a Wii Sports de una mera demo y criticaban su falta de profundidad a la vez que otros muchos pedían a gritos una segunda parte. Casi tres años después, Nintendo nos ofrece, no una segunda parte, sino una renovación de la serie, como se desprende de las populares entrevistas de Iwata a sus trabajadores.
En esta ocasión, y emulando los propósitos del Sports original, Resort nos presenta uno de los nuevos periféricos de la consola, el Wii Motion Plus (WM+), que mejora notablemente las capacidades del mando. Así, a través de un título tan popular, la empresa nipona pretende repartir el nuevo periférico entre el conjunto de los usuarios, lo que debería de crear una base firme para que el resto de empresas decidan utilizarlo como controlador estándar de sus juegos.
Y con todo ello volvemos a Isla Wuhu. Miyamoto ha expresado en varias ocasiones que deseaba contar con un escenario que fuera común a una serie de juegos y parece que en Wii ha encontrado la forma perfecta de plasmarlo. Ya tuvimos ocasión de visitar este paradisíaco lugar en Wii Fit, realizando alguna que otra prueba entre las calles y caminos de tan singular paraje. Y es con Wii Sport Resort cuando realmente queda explotado y deja de ser un simple escenario para convertirse en el eje de todas las actividades.
Playa y montaña
Sol y complejos turísticos. La combinación perfecta para recrear un auténtico lugar de vacaciones. Isla Wuhu consigue situarte en un entorno tranquilo, lleno de paz y relax donde ejercitar los 12 deportes que te ofrece. Todo ello con un elevado nivel gráfico, simple y cuidado. No debería de confundirse la simpleza de los Miis o del modelado de los diferentes elementos con la calidad gráfica con la que están hechos. Texturas de calidad que logran mantener el tipo en las distancias cortas, competiciones con múltiples participantes que no provocan ralentizaciones o las físicas son algunos ejemplos que demuestran que Wii Sports Resort es un título trabajado hasta el más mínimo detalle.
Así suenan la playa y la montaña
Si el apartado gráfico del juego se caracteriza por su sencillez y su buen hacer, el sonoro no se queda atrás. Ofrecen melodías alegres y dinámicas que acompañan en todo momento a lo que está sucediendo en pantalla. Además no han tenido miedo a la hora de dejar el protagonismo a los sonidos ambientes y mecernos en un silencio durante la práctica de las diferentes disciplinas. Por ejemplo, durante los partidos de baloncesto podremos disfrutar de la algarabía del público pero es imborrable el sentimiento de paz que te inunda cuando, en las pruebas de tiro con arco, sólo te acompañan el suave oleaje del mar o el romper del agua al caer de la cascada. Obviamente no todas las pruebas están sumidas en el silencio, por ejemplo, durante los paseos en bicicleta suaves melodías acompañarán tus pedaladas.
