Wii, estrella sin brillo

Wii
Publicado el 24-06-2008 a las 20:26
Autor: Borja "Raistlin Majere" García

Innovación y nuevo mercado; con esas premisas Wii ha aupado a Nintendo a lo más alto de la tabla de ventas. Ahora, como plataforma líder, su reto es satisfacer a todos los grupos de usuarios. ¿Lo ha conseguido?

Nota: Este artículo recoge la opinión de su autor, no necesariamente de todo el equipo que conforma Todojuegos.com

Ha pasado casi un año y medio desde que Nintendo comercializó la Wii en Europa, aunque parece que fuera ayer el día en que Reggie Fils Aime y Shigeru Miyamoto se enzarzaron en aquél disputado partidito de tenis virtual durante el E3 de los Ángeles. Presentada en medio de una atmósfera de enorme secretismo, la consola se destapó como una máquina innovadora, que buscaba nuevas fórmulas jugables para abrirse camino en nuevos mercados. Muchos eran los escépticos, y no pocos profetizaron la arrolladora victoria de Play Station 3, vistos los precedentes. Ahora, con los tres nuevos sistemas ya prácticamente asentados, se puede comprobar que Nintendo ha logrado cuajar el revulsivo a sus males. Game Cube sucumbió estrepitosamente ante una Play Station 2 que aun hoy se niega a fenecer, mientras que la novata Microsoft, entró, plantó cara e incluso venció a la compañía de Kyoto. En cualquier caso, aquí está Wii: mucho menos potente que sus competidoras, pequeña, compacta, elegante, lanzada más barata que le resto y provista de un mando característico que hace las delicias del menos curioso. Todo esto le ha permitido el ascenso imparable hacia la cúspide de las ventas.

Pero al hablar de una consola, hay un elemento ineludible que no puede pasar desapercibido: los juegos. Play Station 2, durante su prolongado reinado, contó con títulos de todos los colores, edades y temáticas. De entre toda la cantidad de morralla que todo catálogo grande suele tener, se pueden rescatar muchos videojuegos que han destacado por su calidad en todos los aspectos. En dicha lista están algunos de los mejores de la generación; Final Fantasy X/XII, Metal Gear Solid 2/3, la saga God of War, Okami, GTA, Ico/Shadows of the Colossus o Silent Hill 2, y 3 son ejemplo de ello. Con Wii tenemos un panorama desolador, y no me andaré con insípidas palabras vanas para justificar lo que hay en las estanterías de las tiendas. Es cierto que Nintendo quería que todos jugáramos, hasta el menos enterado, pero “todos” también somos los que llevamos jugando toda la vida, y eso parece que ni la propia Nintendo lo tiene demasiado en cuenta. La empresa japonesa ha lanzado- al menos- títulos como Super Mario Galaxy, Metroid Prime 3, Mario Kart o el venidero Super Smash Bros. Brawl. Pero faltan, muchos más, y esperamos que en este E3 se presenten productos enfocados también al usuario clásico.

La cuestión no es realmente el enfoque del juego, si bien es cierto que yo creo que se debe lograr un equilibrio, por lo menos por respeto a aquellos usuarios tradicionales que fueron cautivados por la idea de Wii y que buscaron un prisma innovador en juegos de verdad trabajados. El problema es que muchos de los denominados juegos “casual” están desarrollados en periodos cortos, con presupuestos irrisorios y sin apenas trabajo. Importa más el lanzamiento churrero que otra cosa, y eso es algo intolerable. Particularmente preocupante es la labor realizada por las third parties, que salvo honrosas excepciones (Capcom, Electronic Arts en según que juegos), están sacando auténticas aberraciones. Todo empezó con los ports de Play Station 2, juegos diseñados para ese sistema que luego, con la excusa “del control innovador” eran traspasados a Wii sin mejora alguna. Esta tónica se ha ido repitiendo una y otra vez, tanto que ahora a nadie le extraña que un juego salga “para Wii y PS2”. Es como la coletilla del mal, después de Wii, el nombre de la consola de Sony, fantástica-en efecto- pero de una generación anterior. Los usuarios de Wii no son inmunes a todo este descalabro; hace unas semanas, Ubisoft se vio obligada a enviar comunicados de prensa para defender su modelo de negocio en la consola de Nintendo. La empresa gala, madre de magníficas licencias y de poderosos juegos en Xbox 360 y Play Station 3, deja para Wii un conglomerado de desaguisados sin precedentes; despuntan-para mal- el vergonzoso Far Cry: Vengeance (con texturas que a veces parecen de Nintendo 64), Nitro Bike, Asphalt Urban: GT entre otros muchos más.

En definitiva: mucho tiene que cambiar la cosa. El primer movimiento lo tiene que hacer Nintendo, debe guiar al resto de compañías y pedir menos cantidad y más calidad. De lo contrario, Wii seguirá siendo la estrella de los números, pero nada más. Brillo es lo que hace falta, y brillo es hacia donde tienen que tender las desarrolladoras. ¿Alguien quiere una consola sin juegos de calidad? Yo digo, contundentemente…¡no!