El control
del personaje es bastante sencillo e intuitivo, y como hemos dicho a los
pocos minutos de juego ya le habremos cogido el tranquillo. Con el
gatillo izquierdo casi lo haremos todo, saltar, escalar, subir por una
cuerda. Con el cuadrado interactuaremos con el entorno a modo de
recogida de objetos o apertura de puertas, cajones y demás. Estas dos
opciones serán las mas utilizadas en el juego, claro esta sin descuidar
otras tan o más importantes como el uso de las armas y objetos del
inventario, o la opción que nos permite pulsando el botón
correspondiente de deslizarnos entre las sombras rápidamente para no ser
descubiertos. Como vemos dispondremos de un amplio abanico de acciones y
opciones muy interesante que cada cual podrá emplear al gusto, lo bueno
es que no estamos encorsetados en una o dos acciones siempre podremos
optar por la vÃa o solución que mas nos guste.
La estructura en si de la
ciudad no esta mal concebida, quizás resulte un poco laberÃntica pero
esta claro que ha sido adecuada para la ocasión, y para que en ella
podamos emplear toda nuestra astucia e ingenio en el sigilo. Lo que no
nos ha gustado mucho es la cantidad de tiempos de carga y la duración de
los mismos, mostrándose estos incluso al atravesar alguna ventana, las
cuales por cierto en mas de una ocasión no sabremos a donde nos llevan
realmente, teniendo que comernos doblemente le tiempo de carga para
volver sobre nuestros pasos, algo que resulta bastante fastidioso en
este tipo de entregas, y más aún en un juego de nueva generación.