Es inevitable sentirnos como niños con Doom, de los primeros juegos que tenÃamos en nuestro antiguo PC en un soporte que ya de por si se consideraba como infinito que era los Disckets y que tantas horas no aporto de diversión. Quien no ha instalado en su PC tanto en el de la casa como el de la escuela el Doom para unas partidas o Quake, todos en más de una ocasión hemos jugado aunque sea con el Modo dios activado (no digáis que no, que nos conocemos).
Hacer un juego de esta saga siempre es muy arriesgado porque hay mucha gente muy fan ya no solo de la propia saga si no de la historia de ID en sà que es DOOM. Todo lo relacionado con la historia de John Carmack y John Romero, su pelea, su separación etc es algo que la gente muy fan sigue de cerca pero como siempre ID saca pecho y nos demuestra que Doom puede reinventarse, bajar a los infiernos, fundir un nuevo titulazo y volver a hacernos disfrutar.
Doom ha vuelto y trae consigo una gloriosa entrega cargada de un multijugador con toda la esencia de la saga y modo creación muy chulo que sin duda aportara frescor a la comunidad y una campaña totalmente doblada, cañera y brutal.
La clave no estará en matar solamente, sino que tendremos que hacerlos sin parar un solo segundo y aprovechándonos de las ejecuciones puesto que nos dará munición, vidas o escudo que nos viene vital en la batalla. Además de la historia principal, los chicos de ID nos han puesto zonas ocultas en cada zona en la que estemos. Estas zonas ocultas nos darán unos puntos que pueden ser de armadura o de arma que nos servirán para cambiarlos mejoras para nuestro personaje, como bien puede ser el traje mismo.
Además de esos retos que nos serán muy útiles para poder pasarnos las fases con mayor facilidad, podremos conseguir algún arma interesante que solo se encuentran en estas zonas ocultas, que nos serán vitales para enfrentarnos a las hordas de demonios que van a ponernos las cosas muy difÃciles.