Una feria con falta de chicha por parte de las novedades.
Hace mucho nació la famosa iniciativa de Game de tener una feria tematizada por la tienda donde poder ver las últimas novedades y de paso poder hacer unas compras extras de la cadena con una gran tienda central. Esta feria comenzó bien, tenÃa representación de cada una de las compañÃas punteras, podrÃas probar tÃtulos que van a salir o que habÃan salido y todo marchaba bien pero ocurrió algo inesperado. Decidieron llevarte todo el tinglado a Barcelona, dejando a Ifema y a nosotros sin una feria decente.
Conforme pasaba el tiempo veamos cómo se estaba formando, teniendo cada vez más peso la de Barcelona y menos la de Madrid. Ninguna compañÃa confirmaba su presencia en la Madrid Gaming Experience por lo que cada vez más la burbuja se escapada, pero al final del todo empezamos a ver movimiento. Microsoft confirmó su stand con las últimas novedades (Sony pasó del tema, Nintendo y Bandai Namco optaron por el al XXII Salón del Manga de Barcelona), bastante grande por cierto donde podÃamos disfrutar de tÃtulos de salida inminente o de la próxima navidad. El stand estaba formado por varios puestos para probar Dead Rising 4, Cuphead con una nueva build que siempre funcionaba genial (lo queremos ya), habÃa otros puestos para jugar a lo último de Mercury Steam (Raider of the Broken Planet entre otros), Halo Wars 2 que sale el año que viene y ademas con su nuevo modo de juego (fue una gozada) además de estar por primera vez en España.
Por último habÃa dos secciones para toda la familia, la primera una pantalla inmensa donde poder jugar a Dance Central y por otro lado la posibilidad de poder jugar a Minecraft con las Samsung Gear VR, toda una experiencia. Sin duda un movimiento muy acertado ya que está en su mejor momento para promocionarse, conseguir más y más ventas de cara al periodo estival. Presentar novedades y sobre todo que podamos jugarlas es una apuesta ganada.